El presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, ha defendido como "acertadas" las gestiones que realizó tras recibir información sobre el precio del alquiler con opción a compra del edifico de la Consejería de Economía y Empleo de Arroyo de la Encomienda y se ha ofrecido a declarar ante el juez.

Herrera convocó una rueda de prensa ayer por la mañana después de que el actual delegado territorial de la Junta en Valladolid, Pablo Trillo Figueroa, declarara el lunes ante el juez que investiga posibles irregularidades en la compra venta de este edificio que advirtió a Herrera de su "desorbitado" precio.

Sobre su presencia ante el juez, ha reconocido que desconoce si es procesalmente posible que como presidente de la comunidad acuda al Juzgado de Instrucción número 2 de Valladolid, pero ha insistido en que está "a su entera disposición" para trasladarle las explicaciones que ayer dio ante la prensa y lo que precise.

El presidente afirmó que los responsables de la empresa pública Gesturcal "acertaron plenamente" al decantarse finalmente por la compra a un precio "sensiblemente inferior" al que inicialmente se barajó en la operación y ceñirse al criterio técnico para desechar el alquiler con opción a compra.

El dirigente autonómico ha asegurado que antes de que Trillo Figueroa le planteara sus "inquietudes y preocupaciones", desconocía "los pormenores de la operación", por lo que utilizó esa información para despachar "con quien debía", en referencia al entonces consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva, a quien recomendó acudir "a los criterios de valoración técnicos de la Consejería".

Lo que ha negado es que hubiera una "predeterminación" o una "especie de conspiración para cometer una fechoría" entre los integrantes del Consejo de Administración de la empresa pública Gesturcal. Por otra parte, Herrera también ha defendido su actuación en el año 2006 cuando, tras recibir una carta de un empresario del sector eólico que se quejaba de la paralización de sus proyectos, fue "prudente" al no reunirse con el titular de esta empresa -Ibervento-, ya que de haberle ayudado con esa gestión podría haber derivado en una "indebida mediación".