La producción industrial aumentó un 9,3 por ciento en el mes de enero en Castilla y León con respecto al mismo mes de 2013, al cerrarse con un índice de 91,8. Este incremento contrasta con el leve descenso de la media del país, que registró una ligera caída del 0,1 por ciento, hasta situarse en el 89,7. De esta forma, Castilla y León fue la Comunidad donde más se incrementó este indicador, seguida por Aragón (8,5 por ciento), Andalucía (7,2 por ciento), Navarra (4 por ciento) y Extremadura (1,2 por ciento). En el resto de autonomía la evolución del IPI fue negativa.

De ese modo, la mayor caída se produjo en Murcia, con descensos del 5,2 por ciento, seguida de País Vasco (3,9 por ciento), Asturias (3,7 por ciento), Galicia y La Rioja (3,4 por ciento), Cantabria (3,1 por ciento), Comunidad Valenciana (2,6 por ciento), Madrid (2,3 por ciento), Islas Baleares y Cataluña (1,6 por ciento), Canarias (1,2 por ciento) y Castilla-La Mancha (0,3 por ciento).

Si se analiza la evolución anual de los índices por destino económico en el conjunto del país, eliminando los efectos estacionales y de calendario, se observa que los sectores industriales de bienes de consumo no duradero, bienes de equipo y bienes intermedios fueron los que registraron tasas anuales positivas en octubre. El que presentó el mayor incremento fue el de bienes de consumo no duradero (3,2 por ciento). Por el contrario, el apartado de bienes de consumo duradero experimentó el mayor descenso, un 3,5 por ciento, seguido de la energía, con un retroceso del 3,1 por ciento.

Por ramas de actividad, la producción industrial cayó un 2,9 por ciento en la tasa interanual en las industrias extractivas, aumentó un 0,8 por ciento en la industria manufacturera, mermó un 3,3 por ciento en el suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado, y se redujo un 7,4 por ciento en el suministro de agua, actividades de saneamiento, gestión de residuos y descontaminación.