San Pedro de Zamudia, esta localidad ribereña del arroyo Castrón, de reducida población aunque muy rica en historia, ha conseguido un año más que el sentir de pueblo se haga grande. Y ello porque hasta la vega, concretamente las eras, y bajo la atenta vigía del "Teso" que la domina, han llegado 270 personas ávidas de participar de un encuentro festivo de profundas raíces.

El numeroso grupo de vecinos y residentes fuera de la localidad ha logrado que el registro habitual de 70 vecinos se viera multiplicado por 4. Todo un reto que el grupo de organizadores ha llegado a batir teniendo la finalidad del ansiado encuentro vecinal. Armados con las redes sociales como bandera, el grupo organizativo aupado por los jóvenes han tirado del carro, no sin esfuerzo, para conseguir que la Zamudiada del 2017 fuera grande y digna del pueblo que les vio nacer o en el que tienen raíces familiares.

Comida popular

Desde que hace unos años un grupo de amigos apostó por este encuentro vecinal con una comida en un restaurante de una localidad próxima, la iniciativa tomaba forma hasta llegar al escenario de las eras, uno de los que recoge el sabor más tradicional de este pueblo. Es precisamente en este escenario en el que se han organizado durante el fin de semana los actos de la Zamudiada-2017.

Un programa en el que jóvenes y niños han sido protagonistas pudiendo sentirse orgullosos del empuje brindado por la zamudiada. No faltaron los juegos, concursos como el de elaboración de tortillas, los juegos autóctonos, una misa, bailes con charanga, la comida popular a base de una paellada, actuaciones de danza con el grupo "Zona Dance" o la del grupo "la Bañezaina", así como competiciones deportivas.

Como colofón festivo del encuentro la juventud de San Pedro de Zamudia se hizo notar poniendo sobre el escenario su buen hacer amenizando la verbena. Organización y juventud satisfechos de su pueblo, de San Pedro de Zamudia.