El área de Disciplina Urbanística del Ayuntamiento de Benavente ha incoado expediente para la adopción de medidas de regularización de una iglesia evangélica en la calle Miguel Delibes, en las proximidades de Federico Silva, al carecer la actividad de licencia ambiental.

Los Servicios Técnicos Municipales han sido requeridos para que emitan un informe que determine si concurren razones de interés público que aconsejen su clausura. El cierre, de producirse, se derivaría de incumplimientos normativos que afectan al ejercicio del culto religioso y de reunión.

Los técnicos están examinando si el local, en el bajo del número dos de esta calle, reúne las condiciones de seguridad, accesibilidad, dotaciones e insonorización, que son exigibles para locales de pública concurrencia.

Una denuncia de la comunidad de propietarios del bloque de viviendas en cuyo bajo está ubicada esta iglesia evangélica ha sido el detonante del expediente. Los vecinos solicitaron que se comprobara si el local cumple las condiciones para este uso, y en caso contrario la adopción de las medidas necesarias.

Los técnicos no solo comprobaron que el local no posee licencia ambienta para el ejercicio de esta actividad, sino que existían diversos expedientes relacionados con obras e instalaciones anteriores al uso de iglesia evangélica.

Fuentes municipales explicaron ayer que debido a que el local que está utilizando para el culto religioso la Asociación de Inmigrantes Multirracial de Benavente tuvo con anterioridad otros usos diferentes y que en su interior se llevaron a cabo diferentes reformas, es tan difícil que reúna las condiciones que son exigibles para la actividad actual como que las reformas realizadas con anterioridad puedan legalizarse. Aunque los titulares de la iglesia evangélica han sido requeridos para que aporten la documentación necesaria para la obtención de la licencia ambiental, Disciplina Urbanística precisa que será necesario también la tramitación del expediente correspondiente, bien de licencia urbanística, bien de declaración responsable, para la ejecución de las obras de adaptación del local en función de la actividad que desarrolla, esto es, el culto religioso. Los titulares tenían en todo caso 10 días de plazo para formalizar alegaciones.

Esta es la segunda instalación utilizada para el culto religioso que es expedientada por carecer de licencia ambiental. Hace apenas un año fue clausurada una iglesia evangélica en la Cuesta del Hospital por no reunir las condiciones exigibles por la normativa urbanística.