La Opinión de Zamora

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Absuelven por "dudas razonables e indicios débiles" al zamorano acusado de abusos sexuales a su sobrina de seis años

La sentencia, contra la que cabe recurso ante la audiencia Provincial de Zamora, alude a la falta de testigos y el cambio de versión de la víctima, que no llegó a declarar en el juicio

Juicio celebrado en la Audiencia, del que el acusado ha salido absuelto. S. A. (Archivo)

La Audiencia Provincial de Zamora ha absuelto a un zamorano de un supuesto delito de abuso sexual continuado a su sobrina de unos seis años de edad. Los magistrados del tribunal provincial han entendido tras lo expuesto en el juicio celebrado el pasado 25 de enero en la ciudad, que existen "dudas razonables" sobre lo ocurrido y los indicios de los supuestos abusos, que no presenció nadie como testigo directo más que la propia víctima, son "débiles" por lo que la sentencia es absolutoria.

En el juicio, el Ministerio Fiscal había solicitado condenar al acusado a cinco años y dos meses de prisión, mientras que la defensa había reclamado la absolución. El fallo judicial dado a conocer este martes por instancias judiciales es recurrible en apelación ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.

En sus fundamentos para justificar la sentencia absolutoria, la Audiencia de Zamora ha recordado que hay testigos de los supuestos abusos que podrían haberse producido entre enero y mayo de 2022 durante las visitas que la niña realizaba cada dos fines de semana a su padre, que estaba separado de la progenitora de la víctima.

La denuncia de los hechos partió de la abuela materna, un día al regreso de haber pasado la niña el fin de semana con el padre, cuando fue a ducharla le vio que tenía pegados en la zona púbica y manifestó que se los había pegado su tío.

Sin embargo, tal y como constata la sentencia en base al propio testimonio de la abuela, posteriormente la menor se retractó de la acusación hacia su tío. En el juicio tampoco declaró, sino que se utilizó su testimonio judicial durante la instrucción como prueba preconstituida y tampoco existe exploración médica que pudiera obtener vestigios de los supuestos abusos ni la abuela guardó los pelos púbicos encontrados para su cotejo y comparación.

El tribunal tiene en cuenta igualmente el testimonio del padre de la niña, que aseguró que no tenía ni la más mínima sospecha de los supuestos abusos por parte de su hermano a su hija.

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