El acusado de violar a una joven en la calle Benavente de Zamora en 2018 apareció ayer muerto en su celda en el Centro Penitenciario de Topas, en Salamanca. El joven de 34 años, que se encontraba en prisión preventiva a la espera de sentencia, fue hallado sin vida en el recuento de la mañana, dentro de las rutinas diarias que se llevan a cabo en la cárcel.
Según ha podido conocer este diario, el hombre se encontraba desde hace una semana en el departamento de ingresos en situación de cuarentena preventiva por coronavirus tras haber salido a la calle el pasado día 22 con motivo de la celebración del juicio por la supuesta violación de una joven en la calle Benavente.
En su comparecencia durante el juicio de hace una semana, el hombre aseguró no recordar los hechos ante las cuestiones planteadas por Fiscalía y por la acusación particular. La Fiscalía pidió 29 años de cárcel por los hechos de los que se le acusaban, ocurridos el 15 de octubre de 2018 cuando, presuntamente, el acusado habría seguido a una joven, la habría obligado a acceder a un portal de la calle Benavente utilizando un cuchillo y la habría agredido sexualmente de forma continuada. Posteriormente, el acusado habría llevado a la víctima por Santa Clara y la Marina hasta la zona de Príncipe de Asturias, donde el individuo tenía un piso en alquiler. Al llegar al portal, la joven logró zafarse y pedir ayuda.
