Ya nadie se sorprende ni se da la vuelta extrañado cuando los ve caminando por Santa Clara, patrullando en la plaza de Alemania o recorriendo en sus todoterrenos los barrios de la ciudad. El Ejército ha pasado a ser en estos días un ciudadano más, con la misión encomendada de velar por que se cumpla el confinamiento decretado por el estado de alarma. Una treintena de miembros del Regimiento de Artillería y Lanzacohetes en Campaña, procedente de León era la encargada ayer de vigilar las calles de la ciudad.

"Desde que se activó el estado de alarma, hemos estado realizando patrullaje en sitios como León, Astorga, Ponferrada o Palencia", enumera el teniente coronel José Luis Fernández. Es la tercera visita que realizan a la ciudad, con el mismo objetivo que en su primer servicio el 21 de marzo. "Insistimos a la ciudadanía que tiene que estar confinada en sus casas y solamente salir en casos como el abastecimiento de artículos de primera necesidad", apunta el teniente coronel, quien reconoce que apenas han tenido que intervenir. "Hasta la fecha es verdad que la ciudadanía se están comportando bastante bien, aunque haya habido algún caso en el que hayamos tenido que recordar que hay que ser solidario con el resto de la gente", reconoce, poniendo el acento más en la gente mayor "que sale a tomar el sol y seguir su rutina, que no comprende la situación y a la que le instamos a que vuelva a su hogar".

Una labor que considera muy llevadera, teniendo en cuenta que el Ejército, en sus misiones exteriores "estamos acostumbrados a situaciones un poco más extremas. Este estado requiere un poco de sacrificio para los ciudadanos, pero a nosotros las misiones internacionales nos han dado una experiencia que podemos integrar rápidamente. Nos adaptamos a situaciones muy cambiantes y así lo haremos según se evolucione", asegura.

Anima a cumplir con su parte a los ciudadanos recordando que la población "ha tenido que estar confinada en épocas más difíciles, pero ahora estar en nuestras casas con todas las comodidades, televisión e Internet requiere un esfuerzo mínimo".

En esta misión también es muy importante la organización con otros compañeros. "Todas las Fuerzas Armadas, los Cuerpos de Seguridad del Estado, la UME y el ministerio están trabajando constantemente para el bien público. Nosotros declaramos que daríamos hasta la última gota de sangre si así fuera y estamos respondiendo con prontitud, organizados en turnos y reservando nuestro personal para poder actuar de manera gradual a medida que la situación lo vaya requiriendo", reitera.

Ellos mismos en su patrullaje también cumplen con las normas sanitarias impuestas y recorren la ciudad con mascarilla y guantes, guardando la distancia de seguridad tanto en su recorrido por las calles a pie como en coche, distribuidos en diagonal.

Al igual que los médicos y enfermeras, ellos también reciben el cariño de la gente "de manera constante. Y es algo de agradecer, porque nos reafirma mucho más en la necesidad de nuestra participación en esta misión, aunque los sanitarios son los que están dando el máximo sacrificándose a más no poder y ellos son los que realmente están en primera línea del frente de toda esta lucha. Es algo verdaderamente admirable", valora para finalizar.