Petos de llamativos colores, guantes de goma y bolsas de basura. El traje de faena de los guardianes del Duero es sencillo pero efectivo para su misión: limpiar de residuos la margen izquierda del río. Esa zona es la elegida porque estos guardianes son alumnos del colegio Santísima Trinidad-Amor de Dios, ubicado en el barrio de Pinilla. De esta manera, el proyecto de aprendizaje y servicio que se desarrolla en el centro -con el nombre "Los Guardianes del Duero"- repercute en su entorno.
Aunque habían realizado salidas esporádicas de limpieza, la de ayer era especial, puesto que con ella se conmemoraba el Día Internacional de la Naturaleza. Los participantes salieron por el patio a la calle y comenzaron la actividad inaugurando el mural creado por Óscar Martínez,Óscar Martínez que decora parte de los muros del colegio, con la presencia de representantes de Ayuntamiento, asociación de comerciantes del Pinilla, Ecologistas en Acción y el ampa del colegio.
Dos alumnos, en representación de los participantes, leyeron el manifiesto de los guardianes, donde se expone un decálogo de buenas prácticas con el medio ambiente, como el uso del transporte público, el ahorro en electricidad y agua, la reutilización de las bolsas de plástico o el consumo de productos de proximidad.
"Con este proyecto nos hemos dado cuenta de que la forma más fácil de llegar a las familias ese a través de los alumnos y si se les consigue sensibilizar sobre estos temas, el impacto de proporcionalidad del mensaje es mucho mayor", valoró el profesor Luis de Mena, antes de distribuir a todos los alumnos por zonas para que comenzaran con la limpieza de basura.
Tras la limpieza llegó la reflexión. Con varias bolsas de basura llenas, los estudiantes de la Santísima Trinidad pusieron en común la experiencia para lanzar dos propuestas al Ayuntamiento de Zamora. En primer lugar, puesto que la mayor parte de los residuos recogidos eran de excrementos de perros, instarán al equipo de Gobierno a que coloque en esta zona del paseo del río -entre el Puente de Piedra y el de Hierro-, un "pipicán" para que los dueños de los perros puedan llevar allí a sus mascotas para que hagan sus necesidades sin manchar el césped de la zona.
Por otro lado, aunque los alumnos se mostraron satisfechos con el número de papeleras que tiene el paseo, sugirieron que sí en ellas se coloca el logo de la iniciativa "Los Guardianes del Duero", se subraya que se está en una zona vigilada y los visitantes tendrán aún más cuidado en utilizarlas.
Se trata de nuevos pasos para el objetivo final de este proyecto, que es lograr la distinción de Sello Ambiental "Centro Educativo Sostenible", que concede la Junta de Castilla y León a colegios concienciados con la naturaleza y el Santísima Trinidad parece ir por muy buen camino.
