La intervención en la jornada sobre despoblación de Javier Moll, presidente de Prensa Ibérica realzó la apuesta que LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA hace en defensa de los intereses de su territorio.

Estoy especialmente contento y, yo diría, emocionado, porque volver aquí, a mi querida Zamora, en la cual Prensa Ibérica desembarco hace ya 30 años, tiene un especial significado para mí. Prensa Ibérica, en aquel momento, mucho menos propicio que el actual, tomó la decisión de invertir en Zamora y de quedarse aquí. Como saben, después se fusionaron las dos cabeceras que había y el resultante es LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA.

Hoy nos reunimos aquí para hablar de un problema de Estado, vicepresidenta, que es la despoblación en España. En este Congreso en el que vamos a reflexionar sobre las causas de este preocupante fenómeno, y sobre la estrategia que, como país, deberíamos articular para ponerle freno, quiero agradecer la presencia de las autoridades al más alto nivel institucional y empresarial, así como la aportación de los mejores especialistas en esta materia que hemos reunido aquí para extraer conclusiones que nos ayuden a tomar conciencia del problema y, sobre todo, a tomar decisiones. Vamos a hablar del envejecimiento de la población, del éxodo rural, de las medidas necesarias para impulsar el desarrollo en las zonas más afectadas. Vamos a hablar, en definitiva, del futuro, del futuro de generaciones jóvenes a los que, en provincias como Zamora, hay que dotar de recursos y posibilidades para que, sí así lo desean, puedan construir su proyecto de vida aquí, sin necesidad de abandonar su tierra en busca de otras oportunidades.

El circuito que Prensa Ibérica impulsa, que hemos llamado de La España Vacía, y que hoy llega a Zamora, no es la primera vez que se celebra. Ya hemos tenido actos, dos jornadas en concreto, una en Oviedo y otra en Zaragoza. La voluntad es realizar, a lo largo del año en curso, otras sesiones en diversos puntos de España. Pero Zamora es la provincia de España que más población ha perdido en lo que va de siglo. Si, desde el año 2001 España ha ganado aproximadamente el 15% de su población, ese es, exactamente, el porcentaje que ha perdido Zamora. Estamos, por tanto, en un lugar que es paradigma del problema y posiblemente el caso más palpable de regresión demográfica en nuestro país. Algunos datos son estremecedores: 238 de los 248 municipios de Zamora, o sea, el 96% han perdido población. Una de cada cuatro localidades ha reducido en un tercio su número de habitantes y la propia capital ha bajado también en población. En la actualidad viven en la ciudad de Zamora 4.000 personas menos que hace 20 años. Se marchan, sobre todo, jóvenes, lo que plantea un serio problema de envejecimiento. Zamora es la segunda provincia de España con mayor proporción de personas de 65 años: el 31% de la población. El 12% es octogenaria, el doble que en el conjunto de España que es del 6%. Esto conlleva un bajo índice natalidad, una alta tasa de dependencia, que en Zamora es 8 puntos mayor que el promedio de Castilla y León y de España. Mientras que en España hay, prácticamente, un fallecido por cada nacimiento y en Castilla y León dos fallecidos por cada nacimiento, en Zamora hay tres fallecidos por cada nacimiento.

A la hora de buscar soluciones, los expertos coinciden en señalar que hemos de acabar con la España de dos velocidades: una desarrollada, con población, recursos, servicios e infraestructuras, y otra, infradesarrollada, con carencias notables en el capítulo de las inversiones públicas. En este sentido queda mucho por hacer, pero quiero también poner en valor lo que ya se está haciendo. Hay, también, noticias positivas. Por ejemplo: el informe PISA de Educación, sitúa a Castilla y León como la segunda mejor comunidad por los conocimientos y el desempeño de sus alumnos. Y Zamora es una de las provincias con mejores resultados. Se están superando también barreras de comunicación importantes: es el caso del nudo de las autovías hacia Galicia o de la Ruta de la Plata. La llegada del AVE coloca a Zamora más cerca de Madrid. El Alvia tarda actualmente una hora y media. Con la alta velocidad el tiempo se reduce a menos de una hora. Otro dato positivo es el turismo: la provincia de Zamora ha batido su récord de visitantes en los dos últimos años.

Quiero ser optimista. Los que me conocen saben que lo soy, pero un optimista constructivo, no un optimista ingenuo. En los treinta años que llevamos aquí hemos intentado muchas cosas. Desgraciadamente no han cuajado como hubiéramos deseado. La única actitud constructiva es seguir intentándolo hasta que lo consigamos. Hay que intensificar el esfuerzo, dotar a la España vacía de recursos y servicios y yo creo que lograremos revertir la situación.

Estamos hablando de educación, tecnología, sanidad, banca, infraestructuras, transporte… De medidas e inversiones que revitalicen en lo económico y en lo social en nuestros pueblos. Que favorezcan la repoblación y que conviertan al medio rural en un lugar atractivo para emprender y para vivir. Es clave impulsar el desarrollo profesional y el entendimiento. Es esencial apoyar la puesta en marcha de nuevos negocios y ayudar a los que ya existen. Ha llegado el momento de reflexionar en torno a las políticas que en España han llevado a la concentración de la actividad económica en las grandes ciudades. Como saben, no vienen de ahora. Ya en la década de los 60, fruto de la industrialización, el país vio como cientos de miles de españoles abandonaban el campo para marchar a las ciudades y al extranjero. Este éxodo rural concentró a la población en lugares como Madrid, Barcelona, Bilbao y llevó a un crecimiento demográfico en el litoral en perjuicio de la meseta central.

Por lo tanto, el fenómeno va más allá de Castilla y León. Comunidades como Extremadura, Aragón, Asturias se están viendo también muy afectadas por el abandono de población en sus municipios. Baste con echar un vistazo a las cifras de densidad de población que maneja Eurostat para corroborar la dimensión del problema: en Alemania hay 233 personas por kilómetro cuadrado: en el conjunto de la Unión Europea 177 personas por kilómetro cuadrado; en España menos de 92 y en regiones como Castilla y León solo 26 personas por kilómetro cuadrado. Prensa Ibérica, el grupo editor de LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA, se caracteriza por el arraigo a los lugares en que sus cabeceras realizan labor informativa y por la defensa de los intereses de los ciudadanos. A nosotros nos gusta decir que practicamos no solamente un periodismo local, sino hiperlocal. Nos interesan las poblaciones de escasísimos habitantes, porque ellos, si se les dota de la tecnología debida, obviamente, digital, tienen también el derecho de estar comunicados con todo el mundo. Yo les garantizo que diarios como LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA, El Periódico de Extremadura, La Crónica de Badajoz, El Periódico de Aragón o La Nueva España en Asturias, están dispuestos a dar la cara por la España Vacía y van a velar por un futuro mejor para sus habitantes. Entendemos, además, que es una parte de nuestra responsabilidad social y pensamos que la organización de foros como el de hoy constituyen una modesta aportación a la solución del problema. Visibilizarlo es el primer paso para concienciar a la opinión pública y para que, entre todos, busquemos soluciones que sean eficaces.