CGT Educación denuncia que el doble sistema educativo -que diferencia entre público y privado o concertado- "colabora, consolida y a menudo legitima" la diferenciación social. El sindicato se basa en los datos que confirman que no existe alumnado de minorías étnicas en la escuela privada y muy poco en la concertada. "De forma que estas minorías, finalmente, son concentradas en guetos educativos, poco visibles y apenas audibles para la conciencia social", lamentan.

Según el sindicato, para "maquillar" este problema de desigualdad en la escolarización "la consejería se sacó de la manga el programa 2030, dirigido a alumnado en situación de vulnerabilidad socioeducativa y centros de alta complejidad socioeducativa o en riesgo de padecerla, con el supuesto objetivo de favorecer la educación inclusiva de calidad", explican.

La solución, según CGT, pasa por varios cambios, comenzando por acabar con la actual política de matriculación y distrito único, regulando y limitando la libertad de elección por parte de los padres, repartir equitativamente este alumnado entre todos los centros que reciben fondos públicos o dotar a los centros de recursos humanos y económicos suficientes para atender esa diversidad; acciones que ya han transmitido a la Consejería de Educación.