Un cartel para promocionar el turismo en Santander en el año 1941, "recomendaciones" algo más que machistas sobre el comportamiento que deberían tener las mujeres de hace ya varias décadas, el calendario zaragozano para no olvidar ninguna fecha importante en 1991, el cruce de enfrentamientos de la primera jornada futbolera de 1960, una cartilla de racionamiento o las gafas vendidas para el famoso día de Reyes de 1984, cuando TVE anunció la emisión de la primera película en tres dimensiones. Estos son algunos de los artículos que el Museo Etnográfico ha digitalizado para dar contenido a su nuevo espacio web, "Ephemera".

El proyecto nace de la observación de los responsables del museo en el día a día. Los trabajadores detectaron que, en muchas ocasiones, los visitantes obviaban los artículos de mayor valor y centraban su atención en las curiosidades que les despertaban la nostalgia, la risa e incluso el llanto. De ahí que, desde el Etnográfico, decidieran recopilar algunos de esos papeles y objetos de difícil catalogación para organizarlos y ponerlos a disposición de la gente en el propio recinto y a través de la web.

El bibliotecario del museo, Emilio Ruiz Trueba, y el encargado del diseño del espacio en Internet, Luis Vincent, definieron este proyecto como "gabinete de curiosidades impresas". "Es una recopilación de recuerdos humildes", subrayó Ruiz Trueba, que explicó que la web se divide en varios apartados para poder dotar de una cierta coherencia a la recopilación.

Además, el bibliotecario del Etnográfico remarcó que el contenido podrá ampliarse de manera infinita, y destacó que la web se nutre de la colaboración de personas anónimas que envían estos papeles y estos recuerdos. "No todos ellos tienen que ver con Zamora o con Castilla y León", matizó Ruiz Trueba, que insistió en que "no son grandes cosas", pero que enfatizó su valor desde diferentes puntos de vista.

Cabe destacar que, en la web, además de la organización en apartados destinados a integrar cada objeto en su contexto, también se incluye una ficha explicativa con la fecha, el tamaño real de la pieza y los detalles acerca de su contenido y su valor. "A pesar de todo, estos son papeles para tocar", advirtió Emilio Ruiz Trueba, que animó a los interesados a acudir al Museo Etnográfico para apreciar esta "colección".

Del mismo modo, y dirigiéndose a las personas que tengan intención de enviar algún recuerdo, Ruiz Trueba aseguró que se pueden digitalizar documentos en papel, cartón, metal, plástico o loza, y afirmó que el Etnográfico cuenta con retales de diferentes generaciones, desde finales del siglo XIX hasta casi la actualidad, incluso con publicidades procedentes del buzoneo "en las que parece que no hay nada, pero hay mucho".

Los promotores de esta iniciativa presentaron su proyecto recientemente en Madrid y, según su percepción, "gustó mucho", por lo que planean insistir en un proyecto que apela a la curiosidad, a la nostalgia y a la puesta en valor de aquellas pequeñas cosas.