La Audiencia Provincial de Zamora remitió este jueves las sentencias que condenan a dos acusados por delitos relacionados con el tráfico de drogas en Zamora capital. En ambos casos, los hechos se cometieron durante el verano del 2018 y han traído aparejadas penas de prisión y sanciones económicas para los implicados, que fueron interceptados por la Policía Nacional en posesión de diferentes sustancias y de otros elementos que les relacionaban con la venta de estos productos.

En el primero de los casos, un joven nacido en 1993 fue interceptado por los agentes en una calle de la capital a eso de las diez de la mañana del 29 de junio del 2018, en pleno desarrollo de las Ferias y Fiestas de San Pedro en la ciudad. Al encontrar indicios de un posible delito, la Policía registró al individuo y halló varios envoltorios con sustancias sospechosas.

Una vez fueron convenientemente analizadas, resultó que estas bolsas contenían diferentes cantidades de MDMA. Según las pesquisas policiales, la intención del acusado era vender la droga a terceras personas. Además se le requisaron varios billetes relacionados con el ilícito.

En total, los agentes requisaron casi nueve gramos de MDMA con diferentes niveles de riqueza, una cantidad valorada en 303 euros. Tras la celebración del juicio correspondiente, la Audiencia Provincial acordó condenar al acusado a dos años de prisión y a una multa de 500 euros que, en el caso de no ser abonada, añadirá dos meses a la pena impuesta por el juez.

Por otro lado, unos meses más adelante, el 25 de agosto del pasado año 2018, los agentes de la Policía Nacional interceptaron a un hombre que caminaba con actitud nerviosa por el camino de Valdericas, ubicado en la periferia de la capital. Los representantes de la ley procedieron a cachear a este individuo, que carecía de identificación y que, finalmente, resultó ser de nacionalidad francesa.

Durante el citado proceso de búsqueda entre las pertenencias de este ciudadano, los agentes hallaron 90,85 gramos de resina de cannabis, valorados en cerca de 500 euros, y 21,86 gramos de cocaína, tasados por encima de los 2.000 euros. Además, el acusado llevaba encima una balanza de precisión y 450 euros en metálico que, según las pruebas recogidas, tenían relación con el ilícito y procedían de la venta de este tipo de sustancias.

Una vez examinadas y recogidas todas estas pruebas, y teniendo en cuenta el "arrepentimiento total y absoluto" del acusado, la Audiencia Provincial acordó condenarle a una pena de un año y medio de prisión y a una multa de 2.700 euros que, en el caso de no ser abonada, supondrá cuatro meses más de internamiento, según recoge la sentencia publicada.