La donación voluntaria de sangre es fundamental para asegurar tanto la existencia de reservas como que éstas sean de una calidad sanitaria adecuada, frente a otros sistemas que funcionan en el mundo que no aseguran estos parámetros. Es lo que trató de demostrar ayer en Zamora Isabel Antolín Denizot, del Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León, que pronunció una conferencia en las Jornadas Infosalud clausuradas ayer por la Fundación Científica Caja Rural de Zamora en el Colegio Universitario.

-¿Qué problema tiene pagar a las personas a cambio de que donen su sangre?

-Una donación pagada es una donación de mala calidad. Porque el donante no va a decir toda la verdad cuando le hacen la entrevista para ver si es apto para donar con una sangre de calidad. Porque lo que persigue es el dinero, no mejorar la salud de una persona. Hay situaciones que no te permiten donar, por ejemplo si viajas a un país con malaria. Si tu lo dices no puedes donar. Y si te lo callas es posible que tampoco se detecte en los análisis si la infección está en el periodo ventana, cuando aún no se puede detectar. En la India se ha descubierto que se transmiten muchas enfermedades porque los indios no donan de manera altruista.

-¿Qué otros sistemas hay?

-Hay países donde se paga, pero no lo dicen abiertamente, la donación es de reposición. En Sudamérica la sanidad es privada, la gente se tiene que hipotecar para una operación. Pero además del dinero los médicos que van a pedir que aporte veinte donantes porque van a necesitar sangre y la gente busca, sobre todo entre la familia. Pero si no encuentran dentro de su familia para donar de manera altruista van a buscar en la calle y lo van a pagar. La consecuencia es que se salva pero corre el riesgo de contraer una enfermedad que empeore su calidad de vida.

-¿Otros métodos encubiertos?

-En algunos países, por ejemplo, acuden a los cuarteles miliares y les "obligan" porque al que no done le dejan sin permisos. Nosotros no podemos entender que una persona se muera por falta de sangre, pero en muchos países no es así, por cuestiones culturales la gente no dona tanta sangre y sólo la utilizan para los pacientes más jóvenes.

-¿Cómo funciona en Estados Unidos?

-La donación de sangre es altruista, pero la aféresis, la de plasma, es pagada. Lo que ocurre es que la congelan y hacen una cuarentena para certificar su calidad. La usan para vender productos de ese plasma que necesitamos en otros países.