"Me quedé sin trabajo, el banco me desahució y ahora vivo en la calle". Con frases reales como estas y bajo el eslogan "Ponle Cara", Cáritas Diocesana ha presentado esta mañana su última campaña con la que quiere dar visibilidad a las personas sin hogar que viven en Zamora.

Según ha explicado María León Gago, responsable del Centro de Acogida "Madre Bonifacia", durante el pasado año se han atendido a tres tipos de personas: mujeres y hombres que han vivido situaciones de violencia en el ámbito familiar, personas que han tendido que dejar sus viviendas por impago y también extranjeros que han solicitado protección internacional.

En total, han explicado, 816 hombres y mujeres que a lo largo del 2018 han tenido que solicitar ayuda a la institución. Sin embargo, León Gago se ha mostrado optimista, ya 26 personas han logrado encontrar empleo este año, mientras que el 80% están formándose en distintos cursos.

León Gago ha hecho por otra parte un llamamiento a la sociedad para que no dé la espalda a estas personas que se encuentran en una situación de desamparo porque además de ayuda necesitan reconocimiento por parte de la sociedad" para seguir adelante.