Profesionales de algunos centros de salud de Zamora, como el de Puebla de Sanabria, han decidido negarse a pedir la comida del catering contratado por la Consejería de Sanidad con destino al personal de guardia, por su falta de calidad, la gran cantidad de aditivos que tiene, el despilfarro en envases y el gasto que supone en almacenamiento y transporte y solicitan alternativas, bien que se abone a los sanitarios el importe y se traiga cada uno su comida, o que se arbitren contratos con la hostelería local.

El revuelo que ha armado en todo el mundillo sanitario el famoso catering, contratado por cinco años con una empresa según el pliego promovido por el anterior equipo de la Consejería de Sanidad, ha obligado a los actuales responsables a ponerse en contacto con los profesionales. En el escrito les piden disculpas y ponen a disposición de los afectados un correo electrónico (manutencion.profesionales@saludcastillayleon.es) para que comuniquen las incidencias, con el fin de avaluar la calidad y cantidad de los menús enviados.

El departamento que dirige Verónica Casado emitió también ayer un comunicado público en el que explica que "a raíz de las quejas que llegaron a la Consejería de Sanidad el sábado por la noche en relación al estado de consumo de algunos de los alimentos repartidos a los profesionales de guardia en Puntos de Atención Continuada y en los Servicios de Urgencias de Atención Primaria, la Consejería de Sanidad ha decidido iniciar las acciones necesarias para reclamar a la empresa adjudicataria del servicio la necesidad de que éste se cumpla en las condiciones establecidas en el contrato". Según ha podido saber la consejera de Sanidad, de primera mano, "en algunos casos han llegado alimentos a los Puntos de Atención Continuada (PAC) y a los Servicios de Urgencias de Atención Primaria (SUAP) con la fecha de consumo preferente y la fecha de caducidad sobrepasados".

El contrato, determinado en agosto de 2018 y adjudicado a principios de julio de este año, estipula una serie de condiciones de requisitos mínimos para la prestación del servicio entre los que se encuentran "la adecuación a la seguridad alimentaria" por parte de la empresa adjudicataria, "con los máximos niveles de calidad". Desde la Consejería de Sanidad se entiende que, "en base a las quejas y pruebas remitidas a ésta, estos principios legales no se están cumpliendo según lo acordado". Por ello, la Consejería "ya está recabando información, en colaboración con los profesionales sanitarios afectados, así como a través de los responsables del seguimiento del contrato en cada área de salud, para poder reclamar a la empresa adjudicataria un servicio adecuado para nuestros profesionales". Para ello, pondrá a partir de hoy mismo a disposición de los profesionales la mencionada dirección de correo electrónico "al que podrán remitir todas las quejas y pruebas que consideren oportunas y que la Consejería recopilará a fin de exigir a la empresa adjudicataria que cumpla adecuadamente con sus obligaciones".

Otra de las acciones llevadas a cabo ha sido la mencionada iniciativa de la consejera que "ha remitido a través de los sistemas de información internos de Sacyl" un mensaje "pidiendo disculpas a los profesionales por las molestias causadas y comprometiéndose a tomar las medidas necesarias para que este servicio tenga la máxima calidad".