La alimentación, la elaboración de vinos y el mayor aprovechamiento del sector turístico en la capital y en los pueblos de la provincia son las tres mejores oportunidades de generación de negocio que existen actualmente en Zamora. Así lo indica al menos el informe anual que elaboran desde el Servicio Público de Empleo, el SEPE, ya publicado y elaborado con datos recogidos durante el año pasado.

Por lo que refiere a la alimentación, los técnicos del SEPE aseguran que se trata de un sector en alza que, en cualquier caso, se ve lastrado en parte por las dificultades administrativas "a la hora de exportar el producto y por el pequeño tamaño de las empresas". Las trabas burocráticas, una vez más, salen a relucir como "palo en la rueda" de las empresas de Zamora, algo que no se cansan de repetir los empresarios de la provincia.

Con todo, un análisis de los datos de empleo de la provincia permite aventurar, o así lo creen desde el SEPE, "la ampliación de negocios y nuevas inversiones en las empresas, que darán como resultado, por un lado, el incremento del empleo, así como la inclusión de mayor cualificación en la mano de obra en esta actividad. Además, el incremento de las inversiones tendrá como resultado una mayor calidad de los productos y por tanto una mayor facilidad para su inclusión en el mercado exterior", ese que de momento permanece lejos de las aspiraciones de muchas empresas por su pequeño tamaño y por las trabas burocráticas antes descritas. Además, indican los técnicos, el sector tiene posibilidades de autoempleo.

Por lo que refiere a la elaboración de vinos el SEPE destaca, en primer lugar, los cambios sociales que, dicen, están derivando en nuevas formas de consumo y en mayores inversiones por parte de las empresas. "Esto tendrá como consecuencia un incremento del volumen de producción". Por otra parte, el reconocimiento cada vez mayor de la calidad de los productos relacionados con el vino que salen de la provincia de Zamora "por parte de los mercados facilitará la introducción de los mismos en el mercado exterior". Además, "se está produciendo la introducción de mano de obra con mayor cualificación". Finalmente, el SEPE destaca que esta actividad "influye directamente y de forma positiva en el sector turístico de la provincia". El problema del sector, una vez más, es el pequeño tamaño de las empresas del sector y también la dependencia, directa, de la meteorología.

El SEPE menciona también el sector turístico. Es imposible pasar por alto que Zamora va camino de cosechar el mejor año turístico desde que hay cifras, una cuestión de la que evidentemente se beneficia la economía de la provincia. Hasta julio, indican las estadísticas que elabora el INE, han visitado la provincia más de 150.000 personas, cifras nunca vistas hasta ahora.

Esta situación es consecuencia de "la implantación de nuevas formas turísticas", como el turismo de interior, del que se beneficia la provincia, y el turismo enológico, al alza pero todavía por explotar. "Este es un sector en expansión según los expertos", dice textualmente el SEPE apoyándose también en el informe de previsiones económicas de Castilla y León que elabora Unicaja Banco, informe que también mira al turismo cuando habla de la economía zamorana.

No podía faltar en la lista de ocupaciones con más posibilidades las dedicadas al cuidado de personas mayores, algo lógico teniendo en cuenta el envejecimiento de la provincia. El mayor problema del sector es la precariedad laboral.