Ha sido uno de los ponentes de la VII Conferencia Internacional sobre Tecnología del Aprendizaje para Desafíos Educativos. Wim Vanhaverbeke, profesor de Estrategia e Innovación en la Universidad Hasselt (Bélgica), ha expuesto durante su charla los nuevos modelos de negocio que ya se están gestando y en los que las tecnologías digitales tienen mucho que decir.

-La ponencia que ha ofrecido se titula "Tecnologías digitales y la gobernanza de los ecosistemas de innovación". Cuéntenos cuáles han sido las principales ideas que ha expuesto.

-Fundamentalmente, he hablado sobre la innovación compartida. Hemos entrado en la era de la digitalización, lo que lleva consigo problemas para muchas compañías que se asustan incluso con lo que proponen otras grandes como Google o Amazon. Sin embargo, las empresas pueden ganar mucho colaborando en gestión de la innovación. Es el caso de las grandes multinacionales, que ya trabajan con universidades de todo el mundo. El conocimiento hay que compartirlo.

-Explíquenos un caso concreto.

-En el campo de la salud o en la agricultura, los cambios van a ser radicales porque gracias a la información se va a poder incrementar la producción y reducir el daño medioambiental. El manejo de datos proporciona a las empresas una mejor conexión con el consumidor, ofrece una idea más cercana de cómo es el cliente y ayuda a aumentar las ventas, ya que se les puede ofrecer los servicios que necesitan. Antes, las multinacionales vendían máquinas a los hospitales, era la forma en la que ganaban dinero. Ahora han integrado los datos y dan soluciones para todo el mundo. Pero la empresa es tan solo una parte del proceso. Es necesario que esté implicada toda la sociedad.

-Esto quiere decir que nuestra forma de vida va a cambiar...

-Va a cambiar todo en nuestra vida. Se modificará hasta la forma en la que organizamos el trabajo. Por eso es clave que el gobierno cambie, por ejemplo, la forma de atención sanitaria. En poco tiempo, los seguros de salud y el hospital van a tener acceso a la misma información. Van a estar conectados. Por tanto, habrá que regular a qué información tiene acceso cada uno.

-Pero si es un cambio a nivel global, va a ser complicado que todos los gobiernos del mundo se pongan de acuerdo.

-Mi principal preocupación es que los gobiernos no estén preparados para la revolución digital que nos llega, para el nuevo papel que tienen que jugar en estos cambios como reguladores. Si un país como China decide que va a usar un sistema con el que trabajar, y lo crean para dos mil millones de personas, lo van a exportar y entonces tendremos muchos problemas como el que hemos visto con el "caso Huawei".

-Desde hace unos meses se habla mucho de la tecnología 5G y de la revolución tecnológica que conlleva.

-Creo que es más bien una continuación de lo que estamos viviendo. Es cierto que con el 5G todo va a estar interconectado, no solo los teléfonos o los ordenadores. Es un gran paso para lograr más información ya que al haber más información también se pueden crear nuevas soluciones. Lo veo más bien con un proceso de aceleración del proceso en el que ya estamos inmersos.

-Uno de los principales preocupaciones el usuario es el uso que las empresas le pueden dar a sus datos

-Que las empresas tengan nuestros datos es bueno y malo a la vez. Si, por ejemplo, tienes un problema cardiaco, el gobierno debe asegurarse de que esos datos estén en manos de las personas correctas. Los médicos pueden tener acceso a esa información, los seguros, por ejemplo, no. Necesitamos tener una buena regulación al respecto, aunque por ahora parece que los gobiernos están dormidos.