La plantilla de docentes de la provincia de Zamora se reducirá en doce personas en el próximo curso. Este es el acuerdo que la Consejería de Educación ha alcanzado con los sindicatos y que ha sido difundido por CSIF. Zamora es, junto con León, la provincia que más docentes perderá en el curso 2019-2020 y la que sale peor parada si se tiene en cuenta la población total.
Por partes. La Consejería de Educación suprime ocho plazas de maestro en los institutos de Educación Secundaria y no crea ninguna. Se suprimen diez plazas de maestros y se crean cinco, lo que deja un saldo negativo de media decena. Desaparecen diez puestos de profesor de Educación Secundaria y se crean doce, lo que deja un saldo positivo de dos en este apartado, único con comportamiento positivo. Habrá un puesto menos de profesor de Formación Profesional y no se toca la plantilla de profesores de religión. En total, doce puestos menos. Igualmente, se suprimen nueve unidades de maestros y se crean dos.
Aunque los datos no son buenos para Zamora lo cierto es que la negociación entre la administración y los sindicatos ha mejorado algo el panorama. La primera propuesta de la Junta, siempre según los datos que proporciona el sindicato CSIF. El primer documento que se puso sobre la mesa hablaba de una supresión de veinte puestos y once unidades, por lo que puede decirse que la negociación ha "salvado" ocho puestos de trabajo y cuatro unidades docentes.
La proyección de puestos de trabajo de Zamora contrasta con la situación regional, donde se crearán siete puestos. "Tras la negociación con la Consejería de Educación, se ha pasado de una propuesta inicial de 278 supresiones de docentes y 196 nuevos puestos para el curso 2019-2020, a 261 supresiones y 268 plazas creadas, lo que supone un saldo final de 7 puestos docentes más. Aunque la propuesta inicial de la Junta se ha mejorado, ya que daba un saldo final de 82 puestos menos, CSIF lamenta que haya provincias que sigan perdiendo plazas, e insiste en la necesidad de que haya más profesores, para asegurar y mantener la buena calidad educativa que tiene Castilla y León, y de la que la Administración regional presume", apuntan desde el sindicato.
"Sin recuperación"
El resultado final es la consecuencia de un proceso de negociación que se ha llevado a cabo en todas las provincias de la comunidad, que se inició el 17 de enero en Zamora y que ha finalizado el jueves 7 de febrero en León. Isabel Madruga, presidenta del sector de Educación del sindicato, asegura que los docentes "seguimos sin recuperar en su totalidad los derechos perdidos durante la crisis. Unos profesionales que necesita nuestro sistema educativo para garantizar la calidad que se ofrece en Castilla y León, de la que nuestros políticos presumen y sacan pecho en el ámbito nacional e internacional, pero que olvidan que se consigue gracias a los mayores esfuerzos de unos sacrificados profesionales".
"Los criterios por los que se produce la creación o supresión de plazas, negociados, pero no consensuados en Mesa Sectorial de Educación, siguen siendo unos criterios restrictivos, basados más en criterios económicos que educativos", recalca Madruga, que considera que estos criterios deberían tender a recuperar el profesorado perdido durante la crisis. Para CSIF, los criterios debieran contemplar la "necesaria bajada de horario lectivo", pasando a 23 horas en maestros y a 17 en Secundaria.
