El fin de la campaña de Navidad ha supuesto un severo correctivo para el mercado de trabajo de la provincia. Según la estadística que se mire -la de los Servicios Públicos de Empleo o la del INSS- la conclusión puede ser mala o muy mala. Algo es seguro, y es que al contrario de lo que sucede otros meses -cuando analizar los datos desde determinado prisma permite verlos con optimismo-, en enero no hay punto de vista positivo posible.

Por partes. Las listas del paro indican que 12.221 zamoranos están dados de alta como demandantes de empleo en las oficinas del ECYL. Son 373 más que al término del mes de diciembre, lo que viene a confirmar algo que ya se sabía, y es que prácticamente todos los contratos laborales que se firmaron en las semanas previas a la Navidad tenían una fecha de caducidad corta. La comparación interanual podría resultar positiva si se analiza sin poner en contexto, pues indica que hay 1.246 parados menos que hace un año. Sin embargo, cuando se miran los datos de la Seguridad Social, la explicación de que esas personas han encontrado empleo no se sostiene.

Vistos los datos malos, llega la hora de los muy malos. Zamora tiene 56.358 trabajadores que cotizan a la Seguridad Social. Sin profundizar en el ya terrible dato de que son menos de un tercio de la población de la provincia, las estadísticas del INSS muestran una caída estrepitosa de la población ocupada en la provincia. La cifra actual equivale a 1.063 personas menos que hace solamente 31 días. Esto significa que una media de 34 personas perdieron su trabajo cada día en el mes de enero, una cifra dramática para una provincia pequeña como Zamora y que recuerda a los peores tiempos de la crisis económica.

Por si fuera poco, los datos de cotizantes confirman que no hay personal en activo ahora que hace doce meses. Aunque las cifras del paro hablan de un acusado descenso en los últimos doce meses, los datos del INSS indican que la cifra de trabajadores se ha incrementado en solamente once personas. ¿Dónde están aquellas que ya no aparecen en las listas del paro y que tampoco están ocupadas? Pueden ser tres opciones, ninguna buena. O ya no están apuntadas en las oficinas del ECYL porque no tienen prestación, o ya no forman parte de la población activa o, directamente, se han marchado de la provincia con la intención de encontrar más oportunidades laborales.

A nivel regional el paro creció en Castilla y León en 3.963 personas durante el mes de enero, lo que supone un 2,69%, y deja la cifra total de desempleados en 151.328. En el último año, el desempleo cayó en la comunidad en 12.690 personas, un 7,74% menos, según los datos difundidos ayer por el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social.