La continuada subida de precios y el estancamiento y pérdida de poder adquisitivo de los salarios de los trabajadores pueden producir un "grave problema de subsistencia del trabajador". Así lo creen desde el Colegio de Economistas de Valladolid en su último informe sobre las perspectivas económicas de la comunidad. Los informes dan por sentado que la pérdida de poder adquisitivo que se ha registrado durante los últimos tiempos obedece a la "falta de empleo de calidad que proporcione suficientes horas de trabajo remunerado y unos ingresos adecuados". Un cóctel que, en definitiva, no hace otra cosa que empobrecer al común de los trabajadores con sueldos estancados o que, en el mejor de los casos, aumentan por debajo del ritmo que marca el IPC.

El último informe del Colegio de Economistas de Valladolid incide en factores fundamentales para explicar la situación de la provincia de Zamora, significativamente peor que en otras provincias de la comunidad. Mención aparte, como suele suceder en este tipo de estudios, para la despoblación. Zamora perdió durante el año pasado casi el dos por ciento de sus habitantes siendo la provincia de la comunidad con mayor caída porcentual. La "cara B" de este problema es el elevado envejecimiento, que no se traduce en otra cosa que en falta de población activa y en una escasa demanda de ciertos productos, como automóviles y vivienda, que "tiran" de la economía y del resto de sectores.

Juan Carlos de Margarida, decano del Colegio de Economistas de Valladolid, ha señalado que "frenar la desaceleración en los dos próximos años y conseguir que la economía de Castilla y León crezca implica establecer ejes de actuación prioritarios en torno a la energía, la logística y el transporte, la inversión real en I+D+i, la política fiscal, la formación, la internacionalización y el comercio exterior y, sobre todo, la despoblación".

El decano del Colegio de Economistas de Valladolid ha recordado que Castilla y León sufre un grave deterioro demográfico, basado en el envejecimiento de la población y en la despoblación de su territorio, que implica un elevado interés por el ahorro y ninguna intención de promover el consumo y la inversión. En su opinión, "la despoblación es uno de los más graves problemas de la comunidad y también de España, que debe ser afrontado con "seriedad" y "rigor" de forma urgente". Los datos que maneja el Colegio de Economistas de Valladolid apuntan a que España perderá entre un 15% y un 20% de su población en los próximos 15 años, situación que en algunas provincias de Castilla y León, como Zamora, amenaza la subsistencia misma del territorio.