2018 no está siendo el mejor año para la organización zamorana Acción Norte. Tras el vuelco de dos vehículos durante el pasado invierno y el regreso de vacío del camión-ducha de Ventimiglia por primavera, el rosario de infortunios continúa en otoño. Uno de los todoterrenos accidentados en el susto sufrido el pasado mes de enero por culpa de un reventón, participa desde la pasada semana en la caravana solidaria llevada a cabo en colaboración con las organizaciones Rivas-Sahel y Aire (Asociación Integral de Rescate en Emergencias).

A fin de continuar el proyecto de construcción de cinco parques de bomberos en el Sáhara, una veintena de cooperantes partió con destino al continente africano la pasada semana a bordo del citado todoterreno y de otros ocho vehículos -4x4, ambulancias y microbuses- cargados de ayuda humanitaria.

Sin embargo, a primera hora del pasado sábado, la comitiva fue retenida en el puerto de Orán al parecer por un problema administrativo con el Ministerio de Asuntos Exteriores del país, aunque a juicio de Javier Bodego, responsable de proyectos de la ONG zamorana, el bloqueo respondía más a cuestiones políticas internas que burocráticas ya que en las diez ediciones anteriores de esta iniciativa nunca habían tenido ningún problema. Pero ayer, con la autorización en mano y después de permanecer inmovilizados durante más de ochenta horas en la aduana argelina, los integrantes de la caravana solidaria emprendían de nuevo su rumbo a los campamentos saharauis de Tindouf.

Pese al buen trato que han recibido durante estos días los cooperantes, este nuevo episodio adverso ha demorado los plazos manejados por los miembros de la caravana para la entrega de los vehículos y del material humanitario (médico, alimentario y educativo), ya que algunos de los integrantes tenían fijado el viaje de vuelta en avión para el próximo viernes. Además, el 4x4 zamorano transportaba chaquetones y pantalones usados de bomberos y miembros de Protección Civil para su reutilización gracias a un convenio con las mujeres del taller textil de la wilaya de Bojador, quienes reciclarán las prendas para elaborar bolsas y mochilas.

No obstante, una vez desbloqueada la situación y superadas todas las desventuras, la caravana continúa en dirección hacia territorio saharaui para seguir equipando los parques de bomberos ya construidos en Rabuni, Ausser y Dajla.

Además, está previsto el regreso del colectivo local a finales de año ya que fruto de un acuerdo, la labor llevada a cabo por los efectivos de los parques será remunerada. "En diciembre volveremos otra vez porque hemos conseguido la financiación para que los veinte bomberos pasen de ser voluntarios a profesionales y comiencen a cobrar un sueldo apropiado a las condiciones económicas de allí", explica Bodego.

Así las cosas, contra viento y marea, frente a accidentes de tráfico, trabas burocráticas y percances varios, Acción Norte continúa desarrollando su labor humanitaria para tratar de seguir contribuyendo a la mejora de la calidad de vida de los refugiados del pueblo saharaui.