El diálogo entre artes sustenta la propuesta de la exposición "Contrapunto 2.0" que reúne obras contemporáneas y clásica, cuatro esculturas procedentes de la provincia de Zamora, que se exhibirán a partir del próximo día 23 y hasta el mes de febrero en la Catedral Nueva de Salamanca para conmemorar el 25 aniversario de la exposición de Las Edades del Hombre en Salamanca, titulada "El contrapunto y su morada" y que atrajo a más de un millón de visitantes.

La representación contemporánea zamorana corre a cargo de los escultores José Luis Alonso Coomonte y de Ricardo Flecha Barrio, firmas asiduas en las muestras que llevan el sello de Las Edades del Hombre, mientras que en el apartado clásico figuran "El arcángel Gabriel" y "María anunciada", de la iglesia de santa María La Real de La Hiniesta, a lo que se une "Ecce Homo" y "Virgen Dolorosa" que hiciera Pedro de Mena, del Diocesano. Las esculturas de Zamora compartirán espacio con una treintena de obras clásicas y contemporáneas firmadas por artistas como El Greco, Gregorio Fernández, Juan de Juni, Antonio López o incluso Venancio Blanco.

De José Luis Alonso Coomonte podrá volverse a ver una escultura que se exhibió en la exposición celebrada el pasado año en Cuéllar que lleva por título "El paraíso perdido". La creación, de 2013, está realizada a partir de la corteza de una encina quemada procedente de la dehesa sayaguesa de Amor. La obra, de grandes dimensiones, reflexiona sobre la importancia de la naturaleza y su conservación. La escultura, que en un primer estadio pudo verse en una exposición en el centro de interpretación de las Ciudades Medievales con plantas artificiales, posteriormente Coomonte la doró y escribió en bronce las letras que forman "El paraíso perdido". La obra forma parte de la colección del artista que la cede para esta nueva exposición.

La representación de Ricardo Flecha corresponde a "Ecce Homo", una pieza de gran fuerza, efectuada por el artista zamorano en 1990. El cuerpo de Cristo es de madera de tilo que posteriormente fue policromada en tanto que en la parte inferior el artista empleó elementos metálicos y resina de poliéster. La obra, que se contempló en "Passio", la cita del arte sacro desarrollada en Medina del Campo y en Medina de Rioseco, alude a una representación del Ecce Homo según el evangelio de San Juan, expresa los aspectos más profundos de la Pasión, pertenece a una colección particular y procesiona en Medina del Campo el Lunes Santo y el Miércoles Santo.

En cuanto a las piezas de La Hiniesta, "El arcángel Gabriel" y "María Anunciada" son dos esculturas de principios del siglo XIV de piedra policromada y repintada y de procedencia desconocida. El arcángel presenta deterioros en la nariz, manos y alas, pero es posible "apreciar la gracia de su ejecución en la delicada silueta del cuerpo" y la Virgen está representada embarazada porque la escena "pretende ser expresiva del misterio de la Encarnación del Verbo que el ángel vino a anunciarle", según figura en el catálogo de la exposición Remembraza.

La muestra de Las Edades del Hombre desarrollada en Zamora en 2001 también albergó las otras piezas que completan la presencia zamorana. Las esculturas de Pedro de Mena, que desde la apertura del Museo Diocesano se exhiben en el templo románico de santo Tomé tras pasar por el Museo Catedralicio una vez que cerró sus puertas el convento de las Concepcionistas Franciscanas, están realizadas en madera policromada. "Ecce Homo" responde al arquetipo de busto con un tratamiento naturalista de la imagen que presenta corona de espino real. La "Virgen Dolorosa" es un busto con brazo completos con un rostro hermoso. Ambas fueron concebidas "como imágenes para la oración y mediación a corta distancia en oratorios privados o conventuales", explican en el libro de Remembranza.