Un escueto anuncio en el Boletín Oficial de la Provincia anunciaba la situación: "El Ayuntamiento tiene recogidos varios animales de la especie equina en el centro municipal de recogida de animales. Se requiere que, en el plazo de diez días, los propietarios se personen en el departamento de Salud Pública". Sin embargo, como es habitual, tras este documento se escondía una realidad mucho más cruda. Abandono, hambre y adopción son las tres palabras que sustentan la historia de estos buches dejados a su suerte en plena ciudad de Zamora. Una historia que arranca el 27 de julio de 2018.

En plena ola de calor del pasado verano, tres burros fueron rescatados por los servicios municipales. Aparecieron en La Alberca, sin rastro de chip que ofreciera documentación y con claros síntomas de estar pasando hambre. La rápida intervención municipal permitió evitar males mayores, puesto que los buches a la deriva podrían, en cualquier momento, tomar alguna carretera y causar un verdadero problema. No fue así, sino que los equinos fueron trasladados hasta una nave anexa al centro municipal de recogida de animales situada en el polígono industrial de Los Llanos.

En este entorno, con la compañía de otros perros abandonados y con los cuidados de los trabajadores del centro, permanecen los burros desde hace casi tres meses. En todo este tiempo, sus dueños no han aparecido y el Ayuntamiento de Zamora decidió el pasado lunes dar un plazo máximo de diez días para que se personaran en el departamento de Salud Pública y acreditaran su propiedad a través de la documentación reglamentaria.

Conscientes de la dificultad de que los legítimos propietarios terminen por presentarse en dependencias municipales, el área de Salud Pública trabaja ya en un posible proceso de adopción de los animales. Se requiere interés en mantenerlos en buen estado y la disposición de un lugar apropiado para su estancia. Novias, por lo visto, no les faltan. Y todo parece indicar que la historia de estos buches abandonados a su suerte en La Alberca tendrá, después de todo, un final feliz.