La ciudad pasa hoy de la alerta naranja a la amarilla por la ola de calor. Las altas temperaturas que se han vivido durante toda la semana en Zamora llegaron a su punto culmen ayer con 40,1 grados a las 5 de la tarde, superando la máxima histórica de calor en agosto de 2003, con 39,2. Las mínimas no han bajado de los 20 grados y según los datos de la Agencia Estatal de Meteorología, este agosto es uno de los más calurosos desde que se registran las temperaturas.
Ante la temida ola de calor, los zamoranos ocupan las terrazas de la ciudad y la zona de los Pelambres en busca de una pausa para refrescarse estos calurosos días. Como es habitual, los niños son los que más disfrutan dentro del agua del Duero, como si las duras condiciones meteorológicas no les afectaran.
Las autoridades sanitarias recomiendan no estar en la calle durante las horas centrales del día, desde las 12.00 a las 18.00. Sacyl considera que los grupos que deben estar especialmente protegidos del calor son las personas mayores, los discapacitados y los niños menores de 5 años.
Pero, si no se puede evitar la exposición al sol, los expertos recomiendan beber líquidos sin esperar a tener sed, no tiene porqué ser agua también se puede optar por zumos o frutas frías. Así se evita la deshidratación, que es uno de los problemas más frecuentes ante las altas temperaturas. También hay que rehuir las comidas copiosas y calientes, comer menos cantidad pero más veces al día. Y reducir todo lo posible la actividad física, hacer descansos a la sombra y usar ropa de tejidos naturales, ligeros y holgada de colores claros.
Extremar la precaución
Estas semanas hay que extremar la precaución por los efectos del verano. El golpe de calor es una de las consecuencias más comunes durante las olas de calor. El problema es que muchas veces no se conoce cómo actuar. Lo más importante es llamar al 112, al servicio de emergencias para que los profesionales se encarguen de la situación. Y en lo que llegan los sanitarios se recomienda poner el enfermo a la sombra, quitarle la ropa para airearle y si está cociente darle agua. De la misma manera hay que prevenir otros posibles impactos del calor como los calambres debido a pérdida de sales minerales, el agotamiento que provoca malestar general y la deshidratación.
A partir de hoy se prevé una ligera tregua, pero el calor continuará siendo intenso con máximas de hasta 38 grados. Según Aemet las mínimas no bajaran de los 20 grados en los próximos días. Pendientes de los termómetros en este agosto caluroso, habrá que ver si Zamora vuelve a superar sus cifras históricas. Por el momento la capital continua en alerta amarilla. Se recomienda seguir las indicaciones y tener precaución.
