Una quincena de policías nacionales y municipales participa en el primer curso para dejar de fumar que tiene lugar en la Comisaría hasta el próximo mes de junio. Una singular iniciativa impulsada por la Policía Nacional de Zamora y la Asociación Española Contra el Cáncer que pretende erradicar conductas adictivas como el tabaquismo, uno de los objetivos de las unidades de prevención de riesgos laborales del órgano policial.

Así, durante siete semanas los participantes voluntarios acuden a las diferentes actividades organizadas en el curso de deshabituación tabáquica con el objetivo de aprender a manejar la diferente problemática que supone el hecho de abandonar un hábito tan arraigado durante años. Para ello se ha contado con el apoyo y asesoramiento de un médico y una psicóloga de la asociación.

"Este curso pionero en la Policía Nacional se ha propuesto como una estrategia de prevención de riesgos dentro de una política de control del tabaquismo como así ha sido recomendado por la Organización Mundial de la Salud", explican.

Tras el "éxito" del presente curso, el objetivo es extenderlo a todas las comisarías de la Policía Nacional de Castilla y León.