Unas noventa personas, entre ellas 50 empresarios y profesionales zamoranos emigrados, han acudido esta mañana a la llamada de Zamora 10 para avanzar en el proyecto empresarial, reconocer iniciativas y, en suma, tantear las propuestas de algunas personas que, consideran desde la iniciativa empresarial zamorana, pueden aportar su conocimiento y experiencia en beneficio del desarrollo de la provincia.

Tras la bienvenida del alcalde de la ciudad, que ha centrado su exposición en el grave problema de despoblación que sufre toda la provincia (también la capital) ha llegado el punto de presentar algunos de los proyectos más avanzados, entre los que se encuentra una Escuela de Industrias Lácteas que, esperan los impulsores, puede echar a andar antes de la entrada de 2019.

La jornada, que según Francisco Prieto (gerente de Zamora 10) consistía en “escuchar a los empresarios”, ha tenido como eje conductor el recurrente tema de las licencias. Si algo se ha puesto de manifiesto esta mañana es el tremendo malestar de los emprendedores zamoranos con el laberinto de documentos, permisos y licencias que son necesarios “siquiera para abrir un pequeño bar”. Prácticamente todos los intervinientes han pedido a las administraciones un paso adelante para que, unidas, solucionen un problema que “se lleva por delante muchas iniciativas empresariales”.

Por lo demás, los empresarios también se han mostrado insistentes en mejorar la oferta y promoción turística de la provincia. Para ello también se ha recurrido a las administraciones, instándolas a que trabajen en una oferta conjunta que haga que la provincia sea más identificable y tenga más reconocimiento para evitar, así, “que la principal vía de promoción sea todavía el boca a boca”.

Los empresarios y los impulsores de Zamora 10 compartirán después de la reunión una comida para seguir avanzando en las propuestas y, ya por la tarde, harán una visita turística por las principales zonas de la capital con especial incidencia en la Catedral.