Zamora es una provincia en la que no cae ni siquiera una gota de agua desde el día 29 de agosto, cuando el cielo descargó una tormenta que anegó diferentes zonas de la capital. Así las cosas, hace más de cuarenta días que no llueve absolutamente nada. El mes pasado ha sido, de hecho, el mes de septiembre más seco de los últimos setenta años. Las estaciones de medición de la Agencia Estatal de Meteorología no han recogido ni una gota de agua.

El mapa de precipitaciones del pasado mes de septiembre indica que han sido precisamente las provincias de Zamora, Salamanca, Valladolid, Segovia y Ávila las provincias en las que más se ha resentido la cantidad de lluvias. En ambas mesetas la cantidad de precipitaciones registrada ha sido menor de lo que es habitual. Solo en la zona norte del país se han registrado unas lluvias normales para la época del año en cuestión.

Lo cierto es que, hasta el momento, el otoño está resultando mucho más cálido y seco de lo que es habitual. La media de las temperaturas máximas de la última semana supera los 29 grados centígrados. Son diez más de lo que es habitual para el décimo mes del año. La media de las mínimas es de casi once grados, tres por encima de la media histórica para este registro. Por último en lo que refiere a las temperaturas, la media general de los primeros días de octubre es de unos veinte grados. Para este mes, según los datos históricos que maneja la Aemet, lo normal son unos trece grados y medio.

Además, hace poco más de una semana se superó el récord absoluto de temperatura para un mes de octubre. A las cinco y diez de la tarde del pasado jueves día 5 se registró una temperatura máxima de 32,6 grados. La máxima histórica databa del año 1928 y estaba establecida en 31 grados, con lo que la marca máxima hasta hace una semana se vio superada por más de un grado y medio.