La obra para convertir el edificio del Banco de Españaen cuartel de la Policía Municipal ha pasado de ser uno de los proyectos estrella del equipo de Gobierno a convertirse en uno de los grandes fiascos, merced a los continuos retrasos que obligarán, como mínimo, a doblar su plazo de ejecución. El Ayuntamiento de Zamora ha dado luz verde al modificado del proyecto solicitado por la UTE Urvios-Proforma. Una maniobra que costará cerca de 63.000 euros -no a las arcas municipales- y que deberá estar finalizada en tres meses. ¿Qué implica este nuevo escenario? Que si en ocho meses se ha materializado solo un 35% de la intervención, en apenas noventa días deberá estar listo el 65% restante. Difícil cuenta en un proyecto protagonista por sus continuos retrasos y por su incertidumbre total.

Lo que iba a ser un proyecto bueno, bonito y barato ha pasado a convertirse en una pesadilla para el equipo de Gobierno. El 11 de agosto de 2016, la UTE Urvios-Proforma iniciaba las obras en el entorno del Banco de España. La constructora se había hecho con la adjudicación con una baja prácticamente temeraria, del 24,17%, al asegurar que podía realizar con 631.000 euros lo que inicialmente estaba presupuestado en 833.000. Y apenas unos días después de ese comienzo de los trabajos, arrancaron los problemas.

En septiembre de 2016, la constructora decidió paralizar los trabajos alegando la posible existencia de amianto en los falsos techos del edificio. Una alarma que obligó al Ayuntamiento de Zamora a realizar hasta dos análisis para cerciorarse de que lo que aseguraba la empresa no era cierto. Para cuando llegaron los resultados definitivos, a finales del mes de octubre, ya se había perdido más de un mes de plazo, aunque Francisco Guarido confirmó que no habría concesiones: "La empresa deberá terminar la obra en la fecha establecida".

Meses más tarde, en febrero de 2017 y con el plazo inicial de ejecución vencido, el Ayuntamiento de Zamora confirmaba una nueva paralización de los trabajos. Esta vez ya sin motivo aparente, sin excusas: porque sí. La UTE Urvios-Proforma había dejado de lado las obras de manera unilateral a la espera de un modificado del proyecto. Eso decía. El equipo de Gobierno le instó a seguir trabajando en aquellas zonas no afectadas por el nuevo plan de trabajo pendiente de ajustar, pero los oídos fueron más sordos que nunca. Desde entonces, ni rastro de actividad en el entorno del Banco de España.

Ayer, la Junta de Gobierno Local aprobó el modificado de obra, otorgando un nuevo plazo de tres meses para la ejecución del proyecto. Esto supone alargar los trabajos hasta el mes de agosto, cuando se cumplirá un año del inicio de unas obras ideadas en un principio para seis meses. En este tiempo, la empresa deberá acometer el 65% del proyecto que queda pendiente de ejecutar; difícil de asumir. Mientras tanto, la UTE ha pedido más dinero al Ayuntamiento para concluir la intervención y el Ayuntamiento mantiene que debe hacerlo con el dinero estipulado. Los plazos y el presupuesto final juzgarán, en el futuro, el éxito o fracaso de esta obra.