"El arte contemporáneo tiene que ser más cercano"

- Usted tiene un amplio baraje expositivo pero sin embargo es la primera vez que ponemos ver su obra en la ciudad.

-Hace unos quince años me habló el pintor toresano Juan Carlos Matilla de la galería de Zamora Espacio 36. Entonces no era el momento, pero ahora he vuelto a retomar mi contacto con Castilla y León. En la sala presento una veintena de obras donde cuido mucho la técnica. Se trata de una pintura con personalidad porque siempre he trabajado con mucha libertad.

-Usted emplea la tabla y realiza una técnica muy peculiar

-Trabajo con pan de oro falso, de bronce o de plata. También incluyo óxidos y el metal se oxida, de tal forma que quedan unos fondos muy interesantes. Empleo esta técnica desde hace muchos años, es un continuo en mi producción. Se debe a que mi madre nos enseñó a usarlo a mí y a mis hermanos y me enganchó. Todo lo que es pintura y un medio de expresión es como una guía que te conecta con el alma, es una manera de expresar lo que tienes dentro.

-En la exposición pinta muchos pájaros. ¿Por qué?

-Yo me expreso a través de la pintura y trato de crear belleza o veo belleza en instantes. Últimamente me ha dado mucho por pintar pájaros porque me parecen momentos mágicos los que aparecen se posan y desaparecen. Me cautivan e intento compartir esa belleza porque creo que hay diferentes estratos dentro de lo que uno puede llegar a expresar o sentir.

-Fija su atención también en otros animales.

-Porque hay animales que me llaman mucho la atención. La naturaleza está muy vida y hay animales que me parecen mágicos como las garzas o los ciervos. Los perros solo los pinto en el caso de un retrato donde capto la expresión del animal. En algunos cuadros de pájaros realizo un retrato porque trato de captar esa delicadeza que tienen, con fondos muy etéreos y abstractos.

-¿Tras su pintura hay un pensamiento ecológico?

-No, no tengo ninguna intención ecologista, es más que me llama la atención, sin ninguna connotación.

-Usted también trabaja en la formación artística en varias escuelas de arte. Explíquenos esta otra faceta suya.

-Desde hace cuatro años vivo en Vilagarcía de Arousa, un verdadero paraíso, por motivos laborales. En este momento dirijo dos escuelas de arte donde organizo charlas de arte con artistas contemporáneos consolidados para darlos a conocer y también con creadores gallegos. Son charlas gratuitas pensadas para mis alumnos, pero de las que se beneficia toda la comarca. Además también hacemos masterclass. Es muy interesante porque llegan a todas las edades. En el arte contemporáneo se ha considerado como algo elitista y tiene que ser algo más cercano, tiene que conocerse cómo ha sido la evolución del artista desde sus inicios. Ahora existentes unas fuertes lagunas en formación artística en la actual educación, unas lagunas que están creciendo porque no existe un apoyo a la formación artística.

-Y frente a eso...

-Todo el mundo se queja de la política, de la crisis... y me planteé hace un tiempo ¿qué puedo hacer yo? Mi respuesta fue a mayores poner en marcha coincidiendo con la Semana Mundial de la Educación Artística, que convoca la Unesco, y promuevo actividades con todos los colegios de la comarca que se implican y hacemos algo diferente entorno a un artista. El año pasado llevamos a cabo un homenaje a Joseph Beuys y este año queremos homenajear a la artista Lita Cabellut, una pintora que está triunfando a nivel mundial, pese a las dificultades de ser mujer, gitana y artista. La respuesta a esta iniciativa está siendo magnífica porque la gente tanto aquí como en otros lugares, está indignada. La gente quiere que los niños reciban formación artística.

-¿Por qué cree que se ha desterrado a las artes de los planes de estudio?

-Porque no interesa que haya gente creativa que un individuo más resolutivo. Además, existe un gran desconocimiento del arte porque la gente que trabajamos en él, con una formación académica más clásica, mostramos que detrás hay una perspectiva, unos estudios de punto de fuga o una proporción áurea. También creo que la instituciones tendrían que apoyar más a galeristas que hacen unos comisariados interesantes y presentan exposiciones todo el año en los lugares donde están asentadas.