El Ayuntamiento de Zamora ha comunicado oficialmente al Catastro la reversión a suelo rústico de un 85% de las parcelas declaradas urbanizables en los Planes Generales de Ordenación Urbana de 2001 y 2011. La falta de perspectivas de construcción sobre estos terrenos ha acelerado la decisión del equipo de Gobierno, que se había comprometido a revisar el PGOU para "darle realidad" a las necesidades de la capital. Hasta el momento, los propietarios de estas parcelas estaban sosteniendo una presión fiscal "inasumible", según el Ayuntamiento, para el tipo de terrenos que poseían. A partir de el año que viene, las parcelas volverán a tributar como suelo rústico.

Solo 11 de los 42 nuevos sectores incluidos en el último Plan General de Urbanismo cuentan con un plan de construcción. En superficie, se trata de 1,3 millones de metros cuadrados de los 8,4 que se pretendían urbanizar en distintos terrenos de la capital, lo que apenas representa un 15% del total. El otro 85% volverá el próximo año a ser terreno rústico.

El portavoz del equipo de Gobierno, Miguel Ángel Viñas, ha explicado las razones de esta decisión. "Teníamos un compromiso con los ciudadanos de revisar el Plan de Ordenación Urbanística y este es el primer paso. El Ayuntamiento, de momento, ya está cumpliendo con sus obligaciones", apunta. "Ya hemos comunicado al Catastro los sectores que retornarán a terreno rústico para que los propietarios de las fincas no paguen más de lo que les corresponde en el IBI", indicó el edil de Izquierda Unida y portavoz municipal.

El Ayuntamiento gobernado por IU y PSOE considera que la nueva Ley del Catastro aprobada este verano "certifica el fracaso de los planes de urbanismo que encarecieron tanto el valor de las propiedades que difícilmente las hacían rentables para sus propietarios", según apuntó Viñas. "Eso sí, también propiciaron los pelotazos urbanísticos en los años del boom inmobiliario", aseguró el concejal. "Lo que nos queda por delante es modificar el plan de urbanismo vigente y elaborar un nuevo planeamiento acorde con las necesidades reales de la ciudad", explicó. "Aunque, una vez rebajada la presión fiscal a los propietarios, ya no tenemos tanta premura", apuntó.

La decisión del equipo de gobierno afecta a 29 de los 42 sectores declarados como urbanizables en el último Plan General de Ordenación Urbana. De hecho, tan solo permanecerán como urbanizables once de ellos. Concretamente, los de Rodríguez de Miguel, Camino de la Lobata, Cabañales, Convento de San Francisco, Camino Blanca, Villaclaudia, Vista Alegre, Valderrey, La Cometa, Alto de Valorio y la Aldehuela, sobre los que actualmente hay planes de urbanización pendientes. El resto, un 85% del total de la superficie declarada como urbanizable, volverán a ser suelo rústico a partir del próximo año 2016.