La reestructuración del sistema financiero ha reducido el número de oficinas abiertas en la provincia de Zamora a niveles anteriores al año 1980. Así se desprende de los datos dados a conocer por la Asociación Española de la Banca (AEB) en su informe relativo al ejercicio 2014. Según las estadísticas en Zamora permanecen operativas 54 oficinas bancarias en toda la provincia, 24 si se habla solamente de la capital. No hay sucursales de entidades de crédito extranjeras, ni comunitarias ni extracomunitarias.

Es la cantidad de oficinas más baja de los últimos treinta y cinco años, según la serie histórica de la Asociación Española de la Banca. En 2010 estaban abiertas 60 sucursales bancarias. En 2000 la cifra ascendía a 86 mientras que una década antes llegó a su cifra más alta, 98. Incluso las 72 oficinas abiertas en 1980 suponían una cifra más alta que la actual, un dato muy significativo.

Las fusiones bancarias de los últimos años (entidades que se han unido a otras a través de procesos más o menos largos y costosos), unidas a la crisis general del sector financiero, con oficinas que dejan de ser rentables y que cierran sus puertas, han sido las dos principales causas de este fenómeno.

Los más afectados por esta situación son los pequeños núcleos rurales. El cierre de oficinas en la capital, aunque molesto, puede ser fácilmente superado porque hay otra sucursal más o menos cerca. Sin embargo, muchos pueblos tienen solo una oficina bancaria que, cuando cierra, se lleva con ella el único contacto de los vecinos con el sistema financiero.

Desde la rama bancaria del sindicato CC OO aseguran que el panorama irá a peor en los próximos meses y años. "Los bancos buscan su rentabilidad, reducir costes y personal, y es algo que no va a parar", aseguran. Mientras, muchos pueblos tienen que seguir adelante con la visita de autobuses (en Zamora principalmente de Caja España, aunque los trabajadores de Caja Rural también se desplazan para facilitar las finanzas a los vecinos de los pequeños núcleos rurales) que cuentan, a grandes rasgos, con los mismos servicios que cualquier oficina. Eso sí, las visitas se limitan por norma general a una vez por semana, con los impedimentos que ello supone.

Los vecinos más ancianos de los pueblos son los más perjudicados. Aunque la banca online es cada vez más utilizada por los clientes del sector, sobre todo por los jóvenes, los sindicatos aseguran que no se trata de una opción real para las personas ya entradas en la tercera edad.

En términos nacionales la tendencia es la misma que en la provincia de Zamora. Las 12.999 oficinas bancarias abiertas en la actualidad languidecen si se las compara con las 16.835 de hace 25 años, justo después de la gran expansión del sistema financiero. Como en Zamora, hay que retrotraerse a los años setenta para encontrar una cifra de oficinas tan baja como la actual.