La última sesión del juicio por el crimen de Ricobayo ha servido para que los abogados de los acusados, conocidos como "El Nani" y "Kafú", hayan reiterado la inocencia de sus clientes, haciendo alusión a que durante la vista no se ha demostrado que haya "ninguna prueba" para condenarlos. "Las acusaciones solo se basan en conjeturas y convicciones personales a partir de los testimonios de los testigos", ha asegurado la abogada de "Kafú", mientras que el letrado que asiste a "El Nani" ha asegurado que "de las 500 muestras recogidas se concluye que nada apunta para concluir la autoría de mi defendido".
Por su parte, el Ministerio Fiscal ha apuntado que "en muchos delitos no se cuenta con pruebas directas, pero terminan siendo condenados a través de indicios y pruebas indirectas". Por eso ha pedido al jurado "sensatez y sentido común" a la hora de elaborar su veredicto. Será mañana por la mañana cuando los nueve miembros del jurado se reúnen para comenzar su deliberación.
La Fiscalía y la acusación particular solicitan penas de 25 años de prisión para cada uno de los acusados, que se encuentran en prisión preventiva desde hace dos años en la cárcel de Topas (Salamanca), además de una indemnización conjunta de 200.000 euros para los hermanos de la víctima.
La crónica completa, en la edición impresa de mañana y en la página web.
