Las empresas y familias podrán acogerse el próximo año a nuevas bonificaciones que permitan desahogar su situación económica con bajas previstas en el IBI, el IAE y las licencias para aquellas sociedades o autónomos que generen empleo. Así lo anunció ayer la alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón, que recogió el guante del presidente de la Cámara de Comercio, Manuel Vidal. El representante cameral instó al Ayuntamiento a tomar ejemplo de las medidas fiscales aprobadas a instancias del regidor de la capital abulense para poder percibir reducciones en los impuestos y contar con suelo público barato o a coste cero.

Valdeón justificó que "en este último año se han congelado las tasas e impuestos municipales pero la previsión para el próximo año es adecuarlos aún más, es decir, bonificar en función de las necesidades".

La medida aspira a superar las más de 3.000 personas que, en el momento actual, se acogen a las exenciones o bonificaciones del Ayuntamiento de Zamora por sus condiciones económicas o familiares. Tal y como ya anunció en su día el concejal de Economía, Manuel Roncero, y corroboró ayer la alcaldesa, las bonificaciones serán una de las líneas maestras que regirán los presupuestos municipales del próximo año.

Además de las bonificaciones en las tasas de servicios esenciales, el Ayuntamiento ha puesto en marcha este año una serie de medidas encaminadas a impulsar la actividad económica y a favorecer la creación de empleo. Estas medidas incluyen bonificaciones fiscales para las empresas de nueva creación y para las que incrementen sus plantillas. Los emprendedores que estén en esta situación tendrán bonificaciones de hasta el 50% en el IAE, y podrán solicitar la devolución total o parcial en las tasas y licencias urbanísticas.

En Zamora, hasta 136 empresas de la capital han pasado de facturar en sus negocios más de un millón de euros al año en 2010 a hacerlo por debajo de esa cuantía, según refleja el padrón correspondiente al Impuesto de Actividades Económicas (IAE). El tributo municipal es obligatorio para aquellos negocios que mueven un volumen de negocio anual por encima del millón de euros. Durante este año, 678 empresas o sociedades han pagado este impuesto, que reporta a las arcas más de 800.000 euros.