Además de rudo o necio, el significado de la palabra bruto ya evoca algo más para los 15 alumnos matriculados en el curso de Edición de vídeo digital de la Concejalía de Juventud. El material grabado sin editar es el bruto, y es parte del lenguaje audiovisual que están empezando a manejar estos avezados jóvenes, de los que la mayoría dan durante dos semanas de agosto sus primeros pasos en la especialidad.

El encargado de guiarlos por el mundo de las cámaras, los planos y los encuadres es el profesor zamorano Javier Alcina, que trabaja como docente de Imagen y Sonido en el instituto Vega del Prado de Valladolid y lleva varios años al frente de los cursos de verano de su especialidad organizados por el Ayuntamiento de la capital.

Con mucha "ilusión y entrega" ve Alcina a sus alumnos, que recorren las calles del casco antiguo grabando un material que luego editan en el "laboratorio" que tienen instalado en la academia Esla de la capital.

Si la parte de grabación les gusta, la de edición, con un programa profesional, les gusta aún más. "Ellos querían saber un poco más para manejarse mejor en Internet. Normalmente estaban editando con programas muy básicos y les interesa mucho conocer otros más especializados con los que obtener un resultado más profesional", explica el profesor. Además de eso, el objetivo de la formación es darles una visión general del mundo audiovisual y que aprendan las técnicas y los nombres que se utilizan para cada plano o para cada parte del trabajo de elaboración del trabajo final.

"Lo primero es quitarles de la cabeza que se necesita una gran inversión para empezar a grabar, porque ahora con una cámara réflex de 400 euros se puede empezar sin problema". De hecho, con dos de esas cámaras los alumnos se están enfrentando a la grabación y realización de un reportaje, un documental o una entrevista, "incluso con dos cámaras, y aprenden a montar las imágenes de las dos grabaciones y a introducir el sonido ambiente".

Todo un plan para pasar las mañanas del mes de agosto sacando el mejor perfil de la capital... y lo que no se consigue en la calle, a trabajarlo después en el "laboratorio". Con las nuevas tecnologías como aliadas se abre para estos jóvenes todo un mundo de posibilidades audiovisuales.