El director general de Caja Rural considera que la independencia de la entidad es posible en un mundo como el financiero, que ha cambiado radicalmente por las fusiones: «Se han ido sucediendo fusiones de otras entidades, incluso algunas de las nuestras. Nosotros siempre hemos sido partidarios de lo mismo y entendemos que en tanto en cuanto no haya una obligación institucional podemos seguir con la organización que estamos llevando. No quiero pecar de imprudente, pero creo que tenemos la consistencia suficiente para poder continuar, como estamos acreditando. Podemos seguir siempre que no pasen otros seis años como estos anteriores, porque entonces no sé lo que podrá pasar no con esta entidad, con ninguna». Cipriano García destacó que Caja Rural tiene ahora mismo una cuota de mercado provincial en torno al 25-26% y consideró que a pesar de las dificultades «no podemos quedarnos anquilosados» y podría seguir la expansión por territorios limítrofes donde no entren en competencia con otras cajas del mismo grupo.