Que un robot pueda ser el fiel aliado de una persona mayor está cada vez más cerca gracias a la motivación que el Torneo de Robótica First Lego ha imprimido en los alumnos que participan hoy en la competición que acoge la Universidad de León. Hasta allí se han desplazado cuatro alumnos del instituto Alfonso IX de la capital junto a su profesor, Florentino Reguilón, para defender su proyecto de investigación, que han basado en el papel de las redes sociales a la hora poner solución a la soledad en el mundo rural.

Javier Ferrero, Tamara Hernández, Miguel Ángel Vega y Joaquín Anatol son los cuatro estudiantes que desde el mes de noviembre están embarcados en esta iniciativa que busca crear futuras vocaciones científico-tecnológicas, gracias al reto que supone para los jóvenes enfrentarse a este desafío.

La competición se divide en dos partes: una competición de robots, en la que los equipos tendrán que cumplir con diferentes misiones sobre una mesa en la que se simulan situaciones relacionadas con las personas mayores, y otra que consiste en un proyecto científico, en el que los participantes investigarán y debatirán sobre aspectos relacionados con la mejora en la calidad de vida de los mayores.

«Como tenemos niños en régimen de internado procedentes de pueblos ellos plantearon que la soledad era uno de los problemas fundamentales de las personas mayores, por lo que nos planteamos cómo hacerles llegar las redes sociales», explica el profesor de los jóvenes, que ve como una característica a tener en cuenta que «a la gente mayor les encanta hablar, por lo que intentar comunicarlos por videoconferencia les serviría de distracción sin moverse de casa», afirma.

Para dar una base real a su trabajo, el equipo, que lleva por nombre Alfonsoines, han consultado a varios alcaldes de municipios y a una médico, que han respaldado la iniciativa de poner las redes sociales al alcance de los mayores.

Además de defender su proyecto, para el que han creado un póster explicativo, el robot de los estudiantes tendrá que sortear pruebas relacionadas con problemas de los mayores, como marcar el ritmo cardiaco de una persona o distinguir entre cuatro cajas la de color verde y transportarla a una base, como si de una medicina se tratase.

Los cinco zamoranos están en León, «con el trabajo hecho, pero con muchas dificultades, porque la gente empieza en agosto y nosotros llevamos solo desde noviembre, de hecho el robot nos lo ha prestado la Universidad de León», comenta el profesor, que echa de menos en la optatividad del instituto la posibilidad de tener una asignatura de robótica. «He solicitado a la Dirección Provincial una optativa de robótica, pero no nos han apoyado, cuando hoy todo gira en torno a eso y además nos animan a participar en iniciativas como estas», lamenta el docente.

El torneo llega hoy a su tercera edición con 16 equipos participantes y procedentes de Zamora, León, Peñaranda de Bracamonte (Salamanca), Oviedo (Asturias) y Paredes de Nava (Palencia) . La liga nació en EE.UU. y se celebra en más de 60 países, con la participación de 16.000 equipos y un total de 200.000 niños, con el objetivo de incentivar de manera divertida y mediante el juego la ciencia y tecnología a edades tempranas.