Las parroquias de la diócesis (en la imagen, San Lázaro) aportaron ayer donativos para ayudar a Manos Unidas a desarrollar su quincuagésima cuarta campaña, en este caso titulada «No hay justicia sin igualdad». La organización pretende fomentar la equidad entre hombres y mujeres en zonas de subdesarrollo.