«Marytrigo es pequeña, pero ya sabe que con la arena del mar se pueden hacer castillos sin mazmorras y con la miga del pan se pueden hacer casas con balcón». Con estas palabras presenta el cuentacuentos Fernando Martos al nuevo personaje que ha creado junto a Alba Bartolomé y que han presentado recientemente en Urueña.

La idea surgió «un día estando en la Villa del Libro con una librero». «En aquel momento pensé que sería interesante que hubiera un personaje que viviera unas aventuras en Urueña», recuerda Martos que desde el primer momento tuvo claro que la criatura «tenía que provenir del mar o hablar con los objetos que le rodean». Estas nociones se las transmitió a la ilustradora Alba Bartolomé que ha apostado por una niña con el pelo azul con muchos matices, al haber nacido en el mar, el vestido amarillo (el color del trigo), con soles y lunas o bien los zapatos de color amapola «para que si se pone triste y mira al suelo descubra la primavera en sus pies y le entren ganas de empezar otra vez lo que le salió mal».

«Cuando Fernando me propuso dibujar este personaje me gustó mucho porque él describe con las palabras», explica la profesora de Escuela de Arte. La artista, que participa también en talleres de animación a la lectura e iniciación a la ilustración, subraya que con la presentación del personaje ante los niños «queríamos saber cómo reaccionaban el público infantil que es muy exigente». ¿Su respuesta? «Fue fantástica, les encantó», sentencia ella, mientras que su compañero de proyecto matiza: «Lo que más le has llamado la atención es el pelo azul y el que sea capaz de entender a los objetos».

En estos momentos el equipo, que con anterioridad han creado «Historia de una nube», ha comenzado a escribir e ilustrar más relatos que verán la luz en una futura publicación. «Varias editoriales ya conocen el proyecto, pero habrá que esperar», matiza Martos a la par que la ilustradora zamorana Alba Bartolomé destaca que «las referencias a otros autores que Fernando ha querido realizar». Así en la primera historia de Marytrigo figura el personaje del cartón de pies bobos, que aparece ya en un poema de Claudio Rodríguez. «Queremos poder hablar con los niños de otras experiencias literarias», concreta el escritor.

Pese a que las aventuras de Marytrigo se desarrollan en la Villa del Libro, en Urueña, «se pueden sustituir localismo para adaptarla a otras poblaciones», desgrana Fernando Martos y Alba Bartolomé argumenta: «Es un personaje fantástico para una sesión de relatos y cuentos con los más pequeños».