La llegada del fin de año trae consigo el habitual repaso a los 365 días que han marcado este 2009 a punto de caducar. Las complicaciones del Plan General de Ordenación Urbana, el proceso de anulación del nuevo edificio municipal o el «bloqueo de la oposición» en la gestión del equipo de Gobierno se asientan sobre la parte negativa de una balanza compensada con la potenciación del turismo, las numerosas obras en la ciudad o la consecución de proyectos como el puente tras años de demora. Un año más, la alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón, se muestra «muy satisfecha» por los logros obtenidos en este 2009 a punto de dar carpetazo y se compromete a seguir trabajando para conseguir nuevos frutos a lo largo del próximo 2010.

-Todos los zamoranos reciben estos días una felicitación firmada por la alcaldesa donde les transmite sus buenas intenciones para estas fechas. ¿Qué les desea a los ciudadanos para este nuevo año que arranca?

-Además de la salud, no hay dudas: trabajo. Ha sido un año especialmente dramático para la inmensa mayoría de la sociedad y en el Ayuntamiento no somos ajenos a ella. Lo principal es que aquellos que tengan trabajo, lo mantengan, y los que no, que lo encuentren. Más no se puede pedir.

-¿Qué costumbres conserva durante la Navidad?

-Yo soy muy convencional sin costumbres especiales salvo la de compartir la Navidad con la familia. Sin embargo, en el Ayuntamiento hay mucho trabajo en estas fechas porque procuro estar con los trabajadores municipales de guardia para hacer familia municipal y también con la sociedad zamorana.

-¿Cómo vivía estas fiestas de niña?

-Me repartía entre Toro y Zamora y las vivía con mucha ilusión, alrededor de la fiesta y el juguete. La noche de Reyes la recuerdo con emoción, tanto que intenté durante bastante tiempo resistirme a creer que eran los padres a pesar de que ganaban los argumentos que me hacían pensar lo contrario.

-¿Cuál era su Rey Mago?

-Gaspar, por la sencilla razón de que una vez vi que ese Rey Mago habló con mi padre y yo pensé que tenía influencia. «¡Si es amigo de mi padre, tendré un trato de favor!», decía, y por eso decidí que ése sería mi Rey?

-En Zamora celebramos el año 2010 con veinte días de antelación a través de la Nochevieja Universitaria. Hubo una frase que se le quedó grabada a mucha gente en sus declaraciones: «Nos hemos sentido solos», dijo durante el balance del evento universitario. ¿Qué valoración hace de todo el proceso de organización y del resultado final de éste?

-Fue complejo porque la iniciativa es simpática y habitual en muchas otras ciudades con ambiente de jóvenes, pero en Zamora nos veíamos obligados a romper moldes por estrenar evento. Es cierto que nos hemos sentido solos en cuanto a apoyo político pero muy acompañados a nivel social, porque después de la celebración muchas personas se acercaron a nosotros para agradecernos la iniciativa y para mostrar su orgullo por Zamora. Se ha producido un gran dinamismo a través de la hostelería, los comercios, los taxistas y el turismo en general, y eso es muy positivo para la ciudad. Toda actividad tiene parte positiva y negativa y aquí se magnificó el aspecto menos buenos ya que se pusieron las vendas antes que la herida.

-Al echar la vista atrás, ¿cree ha sido un año especialmente duro?

-En cuanto a dureza municipal ha sido similar a los anteriores, pero este año ha sido especialmente doloroso por la situación económica de las familias, las empresas y el propio Ayuntamiento. Hemos tenido más presión económica y más cerca las demandas de las personas, de modo que sólo lamento aquellas grandes obras que se pudieron hacer y no se ejecutaron porque significó menos creación de empleo.

-No hay entrevista a la alcaldesa sin que el PGOU salga a relucir. El portavoz municipal reconoció hace unos días que las negociaciones con Adeiza eran «continuas y permanentes» con el fin de conseguir su apoyo. ¿Qué pasará con el Urbanismo de Zamora si no consiguen la mayoría absoluta necesaria para sacar adelante el Plan?

-Sería algo imperdonable para los ciudadanos. En mi responsabilidad no cabe esa posibilidad porque no puedo entender que nadie haga perder la posibilidad de que Zamora se desarrolle. Sin el Plan nadie se atreverá a invertir en Zamora y eso se convertiría en una muralla más. El PGOU es clave y necesario para cualquier aspecto de la ciudad, por eso hay que sacarlo adelante.

-Dada esa relevancia del Plan General de Ordenación Urbana, ¿el equipo de Gobierno se encuentra en la situación de ceder ante cualquier planteamiento que proponga Adeiza?

-A mí no me gusta hablar de cesión sino de acuerdo. Nosotros hemos aportado suficiente a Adeiza y Adeiza a nosotros como para que lleguemos al consenso. Nos hemos hecho eco de muchas de sus propuestas tanto en deportes como en aspectos de su propio programa electoral. A Adeiza le hemos dado suficiente participación en toda la toma de decisiones, sobre todo, en las de índole cultural y patrimonial. Nos hemos ayudado a cumplir nuestros respectivos programas electorales.

-A día de hoy (23 de diciembre) ¿el PP local tiene el «sí» de Adeiza en el PGOU?

-Lamentablemente, no, pero yo espero que recapacite y que Zamora cuente con su propio Plan lo antes posible.

Toro, 1960

Orgullosa de ser la alcaldesa de Zamora, a Rosa Valdeón se le acumula el trabajo en Navidad. Además de sacar tiempo de su apretada agenda para compartirlo con su familia, se siente en el deber de acercarse más que nunca a la sociedad y a los trabajadores municipales, ya que «constituyen la otra familia del Ayuntamiento». Licenciada en Medicina y Cirugía, las labores políticas son las que absorben ahora la mayor parte del tiempo de esta mujer para quien la financiación local es su gran lucha personal. Cuando mira hacia atrás, se encuentra con una niña que pasaba las fiestas navideñas a caballo entre Toro y la capital a la espera de que su Rey Gaspar fuera generoso.