Una pancarta cubre desde ayer el transformador eléctrico instalado en la calle de Granados del barrio de Pantoja como medida de presión emprendida por los vecinos para pedir su soterramiento. En ella se incluye un mensaje dirigido directamente a la alcaldesa de Zamora, a la que condicionan su voto a su petición. Con la misma finalidad el vecindario también ha iniciado una recogida de firmas que ya ha sido secundada por 200 personas. Para ampliar la cifra de rúbricas los presidentes de cada comunidad de vecinos y algunos establecimientos del barrio ponen a disposición de los interesados la posibilidad de manifestar su apoyo a la iniciativa. El objetivo final es «recoger todas las firmas que podamos para presentarlas en el Registro del Ayuntamiento», explica la presidenta de la Asociación de Vecinos de esta zona de la capital, Tina Domínguez.

Las movilizaciones responden a la inquietud suscitada en el barrio por la posible relación entre de la radiación generada por el transformador y los casos de cáncer registrados en el barrio, quince en los últimos diez años. El vecindario ha pedido la mediación del Ayuntamiento para instar a la compañía eléctrica a cubrir la infraestructura, algo a lo que de momento se ha negado. La agrupación vecinal, compuesta por medio millar de inquilinos, sostiene la reivindicación desde hace 16 años y critica la falta de colaboración obtenida hasta ahora por parte del Consistorio. En la institución municipal esperan los resultados de los informes encargados para analizar los posibles efectos sobre la salud de la instalación que, según Iberdrola no emite una radiación mayor a la de la expulsada por un simple microondas.

Al margen de la peligrosidad que puede implicar el transformador eléctrico, los vecinos del barrio también se quejan del deterioro y abandono del mismo «que ofrece una pésima imagen», considera Tina Domínguez. La presidenta del vecindario recuerda además los soterramientos de infraestructuras similares acometidos en otros barrios, como el de La Lana y La Candelaria, donde tras reivindicar esta medida se llevo a cabo.

La pancarta instalada en el transformador eléctrico, que ha sido colocada en la pared frontal del mismo, permanecerá colgada con carácter indefinido hasta que la demanda del vecindario se resuelva.