La diputada del Partido Popular Elvira Velasco aseguró ayer que el actual Gobierno no ha realizado «ni un solo proyecto nuevo» en la presente legislatura y ni siquiera ha llevado a cabo todos los previstos por el Ejecutivo de Aznar para la provincia. En una comparecencia ante los medios de comunicación para contrarrestar la presencia, el día anterior, del delegado del Gobierno, Miguel Alejo, en Zamora para cantar las bondades del Ejecutivo de Rodríguez Zapatero para con la provincia, la diputada del principal partido de la oposición señaló como «preocupante que sea un zamorano quien engañe a sus paisanos».

Y es que, según Velasco, no es cierto que el Gobierno haya cumplido el 90% del programa electoral en infraestructuras de la provincia: «Con el Gobierno de Zapatero hemos perdido cuatro años en materia de infraestructuras. No se ha realizado ni un proyecto nuevo desde marzo de 2004». Indicó que el anterior Ejecutivo, popular, «había dejado listo el Plan Viaria y el actual Gobierno lo ha paralizado. El Gobierno sólo ha ejecutado obras de infraestructuras proyectadas por el Partido Popular, como es el caso de la Ruta de la Plata». Respecto a esta infraestructura la diputada mostró su sorpresa por el hecho de que Miguel Alejo haya prometido que el trazado entre Zamora y Salamanca estará listo en el presente año «cuando la mayor inversión de los presupuestos en tramos como el de Morales del Vino a Corrales está presupuestada para el año 2009». Hay que recordar que esta infraestructura se financia con el denominado "método alemán", que consiste en pagar la obra una vez concluida, en lugar de la práctica habitual que es ir financiando los trabajos a medida que se ejecutan.

Incluso dudó que los presupuestos para el presente año «vetados por el Senado» y que «no cuadran» se puedan llevar a cabo.

La político popular aseguró que la Alta Velocidad ferroviaria que afecta a la provincia había sido planificada por el Gobierno del Partido Popular. Recordó que el tramo entre Villafranca del Duero y Coreses, uno de los principales del trazado provincial, se licitó en el último trimestre de 2007, con un plazo de ejecución de 40 meses, lo que hace prácticamente imposible que se puedan cumplir las previsiones gubernamentales de 2010, y seguramente se acabe entre 2011 y 2012. Con respecto a otras infraestructuras, como la autovía de la frontera portuguesa o la Benavente Palencia señalo que «tras cuatro años de retrasos injustificados se nos dice ahora que se está redactando los proyectos».

A juicio de Velasco, de haber salido adelante las enmiendas del PP a los presupuestos, éstas «hubieran permitido» un mayor desarrollo de las infraestructuras provinciales. Pero Zamora, dijo, no tiene fuerza «en esa especie de mercado persa, los tejemanejes de Rodríguez Zapatero en el Parlamento». Criticó también el silencio de los parlamentarios zamoranos socialistas durante estos cuatro años, en los que Zamora ha perdido el tiempo en el desarrollo de infraestructuras.

«Sólo venden humo, como cuando vienen los ministros de visita»

«El PSOE sólo vende humo», recalcó la diputada popular en un discurso claramente en clave preelectoral: «El 9 de marzo los zamoranos pueden elegir a Mariano (Rajoy) para agilizar las infraestructuras». Tras asegurar que «Alejo no tiene credibilidad ante los zamoranos» por el fracaso de las 115 medidas provinciales que figuraban en el Plan del Oeste, la parlamentaria repasó la visita de los ministros «que quizá se repitan ahora en campaña» a la provincia de Zamora.

Por ejemplo recordó una visita del ministro Jesús Caldera en la que prometió que la autovía Benavente Zamora estaría ejecutada en 2008;

las declaraciones del titular

de Exteriores, Miguel Angel Moratinos en las que también anunció la autovía Zamora-frontera portuguesa; la de la anterior ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo que vino a inaugurar la construcción de unas viviendas en Villalazán «que no se sabe qué ha pasado con ellas»;

o unas palabras de la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez en las que prometió que en tramo Zamora-Sevilla se podría recorrer en tres horas y media, «algo imposible si se cumplen las normas de tráfico».