El catedrático de Bioética de la Universidad Pontificia de Salamanca, José Román Flecha, realizó anoche un amplio y pormenorizado recorrido por los ámbitos de la enfermedad en la conferencia que versó sobre el "Acompañamiento integral al enfermo" dentro de las charlas del Club La Opinión-El Correo. En su brillante alocución, precedida de una exhaustiva presentación por parte de la coordinadora del Club, Carmen Ferreras, partió de la figura del enfermo, entendida como «una parábola viviente de lo que es el ser humano». Recordó que todavía la enfermedad es un tabú que «cuesta reconocer y admitir» que cambia la vida del entorno.

Para el experto, la enfermedad ha sido socializada, comercializada y politizada con el riesgo de «olvidar al enfermo haciendo subir a la enfermedad». Asimismo, abordó el planteamiento del "mal" en el Antiguo y en el Nuevo apoyándose con ejemplos de los textos sagrados.

Prosiguió su intervención con un recordatorio del planteamiento del dolor realizado por el Papa Juan Pablo II en su encíclica, "Sobre el dolor salvador", un dolor cuyo misterio apela «a la fraternidad»

La dimensión espiritual del hombre también tuvo cabida en

las palabras de Román Flecha. «Somos un cuerpo espiritualizado» y aseveró que «aprender a curar es aprender a descubrir el misterio del rostro» en tanto que éste refleja el alma del hombre. Alma, a la que hay también hay que llegar en el acompañamiento integral a través de sus «necesidades como creyente».