El tráfico ferroviario español vive un buen momento, y en especial la línea que pasa por Zamora, es decir, el corredor de Madrid a Galicia con las derivadas hacia León y Valladolid. De hecho, como vienen apuntando los últimos informes de las redes del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) es de mayor crecimiento del país, con un 75% de aumento en un parámetro de medida conocido como “trenes kilómetro”.

El informe del gestor de la infraestructura ferroviaria constata cómo “se mantiene la tendencia de crecimiento observada durante el año: el tráfico ferroviario asciende a más de 151 millones de trenes-kilómetro a octubre de 2022, lo que representa una subida del 13,7% frente al mismo período de 2021”.

Esta nueva época dorada del ferrocarril como forma de desplazamiento de los viajeros se deba a varias circunstancias. ADIF, de hecho, indica que “el incremento responde a varios factores, como la recuperación de la movilidad, la entrada de nuevos operadores por el proceso de liberalización del mercado y la puesta en servicio de nuevas líneas de alta velocidad”.

Entrando en el análisis nacional de los datos, por tipo de servicios, la subida más destacada se observa en los tráficos de Larga Distancia (más 34,2%). Cercanías e interurbanos y Mercancías registran unos incrementos de tráfico del 7,2% y el 6,2%, respectivamente.

Por ejes ferroviarios, en las líneas de alta velocidad el mayor crecimiento se produce en la LAV Madrid-Valladolid-León-Zamora-Galicia (con un aumento del 75,3%), seguida de las líneas Madrid-Barcelona (que incrementa 39,6%), Madrid-Levante (más 39%) y Madrid-Andalucía ( más 34,2%).

Por su parte, en las líneas convencionales, la Madrid-Alcázar-Córdoba-Sevilla-Cádiz es la que contabiliza el mayor crecimiento (más 17,2%). En la línea Venta de Baños-León-Ourense-Vigo se registra un incremento del 11% y en la Madrid-Zaragoza-Lleida-Barcelona-Portbou del 2,1%.

Condicionantes

Los factores que explican el incremento del tráfico ferroviario en España tienen sus peculiaridades en el caso de la línea Madrid-Zamora-Galicia-León-Valladolid, que no ha tenido, por ejemplo entrada de nuevos operadores, como la francesa Ouigo o Iryo no han influido en absoluto en el incremento de viajeros. Es más, en el trayecto de Madrid a Zamora y Galicia no podrán entrar a corto plazo, debido a que las características de la vía, de ancho internacional hasta Orense y de ancho Ibérico para entrar en Galicia, les impide entrar a estos otros operadores, que no cuentan con trenes capaces de asumir este cambio de ancho.

Es el éxito de la línea zamorana-gallega tras completarse todo el trazado de la alta velocidad lo que explica el crecimiento exponencial de viajeros en esta ruta, por encima de las del resto del país.

Precios y frecuencias, aspectos que deben mejorar

El crecimiento el número de viajeros no debe ocultar los problemas que tiene la línea entre Zamora y Madrid, afectada sobre todo por la carencia de plazas suficiente para absorber la demanda y en el alto coste de los billetes, sobre todo para los viajeros ocasionales que se quieren desplazar a la capital de España sin conocer la fecha con mucha antelación. Unos problemas que están lastrando las posibilidades de viaje para los zamoranos en un medio de comunicación, el tren, que ahora mismo es la principal alternativa de viaje a Madrid, sobre todo por su rapidez, ya que en la práctica la mayoría de los trayectos cubren los 250 kilómetros de distancia en prácticamente una hora. A la espera de la declaración de la obligación de servicio público anunciada por el Gobierno, con los abonos para viajeros recurrentes con el 50% de descuento ya en marcha y la rebaja adicional del 25% prometida por la Junta de Castilla y León el frente de los viajeros habituales parece cubierto, así como las posibilidades de que personas con trabajo en Madrid puedan residir en Zamora. Es cierto que estos abonos hicieron que Renfe retirara otros, que aunque más caros, no tenían una fecha de caducidad tan corta y que eran utilizados también por zamoranos que trabajan en Madrid y residen en la provincia. El problema más importante a resolver, sin embargo, es el de la falta de plazas suficientes debido al éxito del AVE gallego y el retraso de la llegada de los nuevos Talgo Avril, que pueden llevar el doble de viajeros en un solo tren que los actuales Alvia. Se supone que estos trenes permitirán a Renfe ofertar más plazas y reducir el precio del billete “normal” ya que esos nuevos Talgo serán más rentables para su explotación en la línea. En cualquier caso el corredor tiene aún mucho potencial de crecimiento, ya que a pesar de ser el que más avanza todavía está a años luz en cifras de viajeros de lo que supone una línea como la Madrid-Barcelona, Madrid-Levante o Madrid-Andalucía. Así, la línea de Madrid a Galicia figura con 6.157 trenes kilómetro, frente a los 14.403 de la línea de Madrid-Barcelona o los 13.242 de la Madrid- Andalucía. Está más cerca de los 7.120 de la Madrid-Levante, aunque en esta sí está prevista la entrada de nuevos operadores. Los datos de ADIF no hablan de cifras globales por trayecto, aunque de uno de los cuadros se puede inferir que los del trazado Madrid-Zamora-Galicia-León-Valladolid estarían rondando el medio millón de viajeros.