La Diputación de Zamora confía en desbloquear "la semana que viene" su plan de ayuda energética para apoyar a los ayuntamientos, en un contexto inflacionista que también sufren los pequeños municipios. El presidente provincial, Francisco José Requejo, ha confirmado la inminencia de la aprobación de los criterios después de que el equipo de Gobierno rechazara una moción presentada por Izquierda Unida en relación a este asunto.

La representante de la oposición, Laura Rivera, había subrayado los siete meses de retraso del plan, tras el anuncio realizado por el equipo de Gobierno, un detalle que no ha encajado demasiado bien Requejo: "Nosotros gobernamos, tenemos nuestros tiempos y también venimos trabajando en otras cosas", ha replicado el dirigente liberal.

El debate, en las mociones

En general, la discusión en el Pleno se ha concentrado en el turno de las mociones, más allá de un primer escarceo por la prórroga del contrato de ayuda a domicilio. La atención se ha centrado en los debates de las dos propuestas de urgencia que han superado el trámite inicial para dar la palabra a los grupos: la vinculada al precio de los materiales y la tocante al Convenio de Albufeira, ambas presentadas por el equipo de Gobierno.

En el primero de los casos, todos los grupos han votado a favor de pedirle al Gobierno de España que amplíe el listado de materiales a tener en cuenta para calcular el umbral del 5% de incremento de los precios de un contrato, y que sea posible la revisión extraordinaria del mismo, así como que sean tenidos en cuenta los incrementos de precio de la energía en las fórmulas de cálculo.

El vicepresidente primero de la institución, José María Barrios, ha demandado que el Gobierno apruebe "un decreto de los habituales de los martes" para darle una solución "justa" a este problema, mientras que Rivera ha apoyado el fondo de la cuestión, a pesar de que, a su juicio, el texto contenía "propaganda política".

En cuanto al Convenio de Albufeira, la propia Rivera ha constatado que el Gobierno de España ya tiene en agenda la necesidad de negociar con Portugal unos nuevos términos, una cuestión que ha llevado al portavoz socialista, Eduardo Folgado, a hablar de demagogia en el discurso defendido por el vicepresidente tercero de la Diputación, Javier Faúndez, que ha criticado aun así que "el Gobierno haya vaciado los embalses en la peor sequía de los últimos 60 años".

Una pared para la oposición

Aparte de estas cuestiones, la aritmética que le otorga la mayoría al PP y a Ciudadanos ha vuelto a suponer una pared indestructible para las propuestas de la oposición; entre ellas, dos muy recurrentes: la del PSOE sobre Sanidad y la de IU acerca del cumplimiento del acuerdo de Memoria Histórica.