La Tierra entró justo ayer en déficit ecológico, según Global Footprint Netword. Es el conocido como ‘Día del Sobregiro de la Tierra’ -en inglés ‘Earth Overshoot Day’-, la fecha que fija el momento en el que la humanidad ha consumido todos los recursos naturales que nuestro planeta es capaz de regenerar en un año. Desde esta fecha y hasta finales de año, la humanidad opera entonces con un gasto de déficit ecológico, es decir, el consumo es mayor que los recursos sostenibles.

En la actualidad, la humanidad utiliza un 74% más de lo que los ecosistemas del planeta pueden regenerar. Se sigue ampliando el déficit ecológico cada año, por lo que es urgente impulsar una modelo económico sostenible entre todos considerando los límites de la Tierra

En este sentido, Aquona se ha convertido en un actor clave por el clima y la reducción de la huella de carbono. No en vano, la empresa que gestiona el ciclo del agua en Zamora está altamente comprometida con la preservación del medio ambiente, ofreciendo soluciones innovadoras en torno a la gestión sostenible del agua, los recursos naturales y la salud ambiental. Todo, tal y como recuerda Laura de Vega, directora de Desarrollo Sostenible y Transformación de Aquona, en línea con la hoja de ruta de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas.

Al respecto, Aquona, según se recoge en su Informe de Desarrollo Sostenible 2020-2021 (https://www.aquona-sa.es/informe-de-desarrollo-sostenible), ha evitado la emisión de más de 14.200 toneladas de CO2 por consumir energía de fuentes renovables. “En los dos últimos años, nuestra apuesta por la eficiencia energética y la producción de energía en las instalaciones que gestionamos ha sido clara”, ha expuesto De Vega, que ha hecho hincapié en que, en términos de energía verde, la compañía ha producido durante ese periodo 7,2 GWh de energía renovable a través del aprovechamiento del biogás como combustible en los motores de cogeneración.

Tal es la apuesta de Aquona en la lucha contra el cambio climático, que la empresa cuenta ya con cien vehículos ECO en su flota destinada a los servicios de agua, saneamiento y depuración, lo que supone el 34 por ciento de la flota.

Otra de las acciones de la compañía en pro del medio ambiente es el hecho de compensar más de 310 toneladas de CO2 gracias al proyecto ‘Sembrando Oxígeno’. En Zamora, por ejemplo, a lo largo de cuatro años se han plantado más de 1.500 árboles de especies autóctonas en La Candelada, Valderrey y Valorio, una iniciativa con la que se pretende recuperar la masa forestal perdida.

En cuanto a la preservación de la biodiversidad, uno de los logros de Aquona es haber eliminado el uso de los fitosanitarios en el 100% de las instalaciones de tratamiento de agua que gestiona en Castilla y León, lo que representa unas 83 hectáreas libres de estos productos químicos. Esto, en palabras de Nicolás Esmorís, gerente de Aquona en Zamora, supone “un paso adelante por parte de la compañía hacia un nuevo modelo de gestión de zonas verdes”.

Preservar la biodiversidad

Otra de las iniciativas de Aquona en beneficio del medio ambiente es el programa de voluntariado corporativo BiObserva, un programa en el que los empleados elaboran censos de aves y que está dirigido a preservar la biodiversidad de sus instalaciones. El despliegue de este programa, que se inició en 2017 con la participación de tres centros de trabajo de Zamora y Palencia, ha acumulado durante 2020 y 2021 más de 8.300 observaciones de aves.

Además, la empresa también lucha contra las especies tóxicas invasoras, en tanto que son una de las principales causas de la pérdida de biodiversidad. Lo que se persigue, ha rememorado Esmorís, es que las instalaciones de Aquona tengan “el estado más natural posible”.

Economía Circular

Por si fuera poco, Aquona desarrolla tecnologías y optimiza procesos para promover la economía circular. Así, la empresa ha puesto en marcha un modelo de transformación de las depuradoras tradicionales en biofactorías. Son ‘fábricas’ de recursos que regeneran el agua para nuevos usos, valorizan todos los residuos y, por último, producen energía para su propio abastecimiento. En concreto, la compañía ha conseguido valorizar el 95,2 por ciento de los residuos generados en las plantas depuradoras que gestiona.

Así las cosas, Aquona promueve soluciones basadas en la naturaleza y la infraestructura verde en la gestión del agua como estrategia para preservar la biodiversidad, lo que contribuye a la mitigación de los efectos del cambio climático y, por ende, a la salud de las personas.