Zamora registra, por el momento, 13 personas cuya causa de la muerte está relacionada con la última ola de calor sufrida en la provincia, según los datos del Instituto de Salud Carlos III.
Las altas temperaturas que han batido récords llegando hasta los 42 grados, las máximas extremas más altas desde que hay registros, estarían detrás de los fallecimientos, lo que supone triplicar las cifras registradas hace un año.
Los datos facilitados por el citado Instituto de Salud Carlos III son elocuentes. Desde el pasado 10 de julio, día del comienzo de la segunda ola de calor de esta temporada, hasta el martes 19 de julio han fallecido 1.047 personas en todo el país, trece de ellas en Zamora.
Para hacerse una idea de las fatales consecuencias de las altas temperaturas hay que tener en cuenta que, en años pasados, los datos de fallecimientos atribuibles al calor rondan entorno a las 2.000 personas durante el verano, mientras que, en semana y media de esta segunda ola, se han superado los mil fallecimientos, la mitad de lo que se estima para todo un ejercicio.
Los extremos matan: los datos del Carlos III recogen las debidas al frío. En total se alcanzan 2.988 muertes relacionadas con la meteorología reinante, aunque el aumento de esta cifra se debe en su gran mayoría a las olas de calor persistentes de este verano.
En cuanto a las previsiones, durante los próximos días en la provincia se mantienen los 36 grados, que sostiene el nivel amarillo. Las mínimas se conservan entre los 15 y los 18 grados.
Los colectivos más vulnerables, sobre todo mayores y niños, son los que más peligro corren en estas situaciones, ya que en ambos casos las deshidrataciones se producen de forma muy rápida. Pero también afectan de una manera directa a aquellos trabajadores que se ven obligados a desarrollar su actividad en las horas centrales del día. De hecho, tres de las muertes acaecidas esta pasada semana fueron de otros tantos trabajadores: un empleado de limpieza y un repartidor de revistas.
Beber agua de manera constante, evitar, en lo posible, la exposición al sol durante las horas de mayor temperatura, son algunos de los consejos de los expertos para evitar los temidos golpes de calor.
En caso de que una persona presente síntomas como mareos, dolor de cabeza e incluso pierda el sentido, se requiere atención médica inmediata.
Para los próximos días las temperaturas serán propias del verano, aunque Zamora se librará de la parte más dura de la nueva ola de calor que se anuncia, sobre todo, para el este y el sur del país.
En la provincia, durante este fin de semana las máximas continuarán en torno a los 36 grados y las mínimas sobre los 18. En el comienzo de la próxima semana, se notará un leve descenso de la máxima a los 34 grados y con unas mínimas más frescas que permitirán un descanso más agradable.
A lo largo de esta semana que acaba la temperatura en Zamora no ha vuelto a alcanzar los 40 grados, siendo 38,8 la temperatura más alta registrada, el pasado martes 21 sobre las seis de la tarde.
Los pronósticos de la Aemet para este verano, que se preveía más caluroso y seco de lo normal, se han cumplido con creces incluso antes de la entrada en el calendario de la estación estival. Y las dos olas de calor están también detrás de los dos mayores incendios registrados en la provincia. Una situación de fenómenos extremos que los científicos atribuyen a los efectos del cambio climático y el aumento de la temperatura en el planeta.
