La Escuela Politécnica Superior de Zamora acoge estos meses a tres alumnos de la Universidad Nacional Autónoma de México que decidieron optar a una beca que les otorgaba la oportunidad de desarrollar sus proyectos de investigación en una facultad extranjera. Y no ha sido por casualidad. Ketzalzin Vázquez —estudiante de Química de Alimentos—, Brandon Alexis Moreno —ingeniero geológico— y Crhistian Coronado —ingeniero civil— decidieron que el lugar donde mejor iban a realizar sus respectivas investigaciones era en el Campus Viriato de Zamora.
Becas competitivas
“Se trata de becas competitivas, con alumnos de buenos expedientes, así que ponen en valor a una escuela pequeña en una ciudad pequeña, pero donde se pueden hacer grandes cosas”, resalta José Nespereira, profesor del departamento de Geología, donde está Brandon Alexis Moreno participando en un estudio enmarcado dentro del proyecto Fauces, centrado en la investigación de geotecnia en fondos marinos sobre la estabilidad de laderas submarinas. “Él se ha centrado en el estudio de una simulación mediante experimentos de laboratorio sobre el comportamiento de los sedimentos”, resume el profesor del campus zamorano.
La estudiante de Química de Alimentos, Ketzalzin Vázquez, ha aprovechado sus vacaciones de verano para aprender en el departamento que dirige Isabel Revilla sobre qué primeros pasos tienen que darse en una investigación. “ Nosotros queríamos poner a punto el método de determinación del espectro de infrarrojos en mieles y le hemos encargado establecer las condiciones óptimas para medir este producto”, explica la docente. “Sabía que iba a ser un laboratorio muy adecuado para participar en la iniciación de una investigación”, agradece la estudiante mexicana.
Por último, Crhistian Coronado será el alumno que permanezca más tiempo en Zamora —hasta el próximo 16 de agosto— y el que más insistencia demostró para venir al Campus Viriato, ya que era la segunda vez que solicitaba esta beca en la ciudad. Está en el departamento de Materiales con la profesora Natividad Antón. “Su proyecto es sobre el comportamiento sísmico de edificios, así que le ofrecí innovar sobre materiales y accedió encantado”, asegura.
Todos coinciden, además, en que Zamora les ha abierto las puertas de par en par, tanto a nivel académico como personal, por lo que están muy agradecidos por esta buena acogida en una ciudad de la que destacan su seguridad.
Compartir investigaciones
Con estas tres experiencias, el director de la Politécnica, José Luis Pérez, subraya que se demuestra “por un lado, la importancia de que diferentes universidades compartamos investigaciones y, por otro, que Zamora se puede abrir al exterior sin problema, porque el campus dispone tanto de profesionales como de instalaciones adecuadas para estos proyectos. La USAL promueve una impronta de calidad de la que la Escuela Politécnica puede presumir”, recalca.