“El delirio de los caballos. Visiones del Apocalipsis en los centros culturales leoneses” representa un proyecto colaborativo ideado por el MUSAC en el que participan trece centros culturales e instituciones de la provincia de León movidos por la necesidad de recuperar la presencialidad y el contacto directo de los museos y el público. Una de esas sedes es el Museo del Bierzo, donde además de fondos propios han invitado a participar a nueve artistas vinculados a Ponferrada y al Bierzo, siendo uno de ellos el pintor zamorano Javier Carpintero, quien reside desde hace varias décadas en la zona.

Distintas visiones sobre el Apocalipsis

“El comisario de la muestra, Francisco Javier García Bueso, ha apostado porque el hilo conductor sean en Ponferrada las decapitaciones a raíz de unos descubrimientos realizados en el Castillo de la localidad donde han aparecido durante una fosa común con restos de la época napoleónica donde varios estaban decapitados y se acordó de mi serie de decapitaciones” explica el zamorano que en “Ponferrada stories”, nombre de la muestra abierta hasta el próximo mes de abril, exhibe ocho piezas algunas vistas en las exposiciones de “Decapitaciones y suicidios”, en el año 2000, y de “Memento” que albergó la sala de exposiciones de la Diputación en 2004, fruto de una beca del Instituto de Estudios Zamoranos Florián de Ocampo, junto a creaciones nuevas efectuadas a lo largo de dos últimos años, tres piezas pertenecientes a la serie de santos en estado de penitencia, dos Magdalenas y un san Jerónimo. “Ahora estoy trabajando en santos que aparecen con una calavera en la mano” describe. Estas piezas, donde juega más con el volumen, tienen un formato más pequeño, una característica de sus creaciones surgidas tras su estancia de un año en Roma.

La presencia de Javier Carpintero viene a ser una pequeña retrospectiva donde el visitante puede apreciar la evolución del creador que trabaja a partir de obras clásicas deconstruyéndolas para volver a generar nuevas piezas. “Conceptualmente sigo trabajando en lo mismo, pero formalmente sí que ha cambiado porque las obras tienen más movimiento y volumen” comenta para a renglón seguido añadir: “Mis obras actuales son casi esculturas, pero voy en la misma línea de reutilización de obras clásicas, aunque los temas siempre están relacionados con la conciencia de la muerte o la asunción de la mortalidad humana”. “Ha pasado el tiempo, pero mis obras tienen un sentido global y quizá lo más distinto sean las piezas de “Memento” donde trabajé sobre planchas de cera o incluso esculturas de terracotas”, matiza el artista que realizó el cartel oficial de la Semana Santa en 2009.

Javier Carpintero regresará expositivamente hablado en septiembre a Zamora. Mostrará su producción más reciente en solitario en la galería de arte de Ángel Almeida, tras más de una década sin exhibir su hacer creativo en la ciudad. “Soy un pintor que crea de una manera muy lenta. No preparo una exposición en unos meses ni en un año por el proceso tan amplio de elaboración que realizo y contar con obra para un espacio amplio hace que se distancie mis exposiciones en el tiempo”, comenta.