Zamora acabó el pasado año 2020 con 228 médicos de familia, que eran 18 menos de los que había el año anterior. El dato está contenido en el informe sobre “Recursos sanitarios públicos 2020” que acaba de publicar la Consejería de Sanidad.
Así, en Zamora había el año pasado 196 doctores de familia trabajando en los equipos de atención primaria más otros 32 facultativos como médicos de área, que son los médicos sin cupo fijo asignado que se dedican a cubrir sustituciones o guardias o reforzar donde hace falta. Pues bien, el año anterior había 202 médicos en los equipos de Atención Primaria, es decir, seis más, y 44 de área, es decir 12 más. No es de extrañar, por tanto, que haya dificultades para cubrir toda la actividad de los consultorios.
En cambio Zamora tiene un pediatra más que el año anterior, 17 en lugar de 16: once de ellos trabajan en los equipos de Atención Primaria y seis son pediatras de área. El personal de Enfermería también ha aumentado en el último año en Atención Primaria. Son 233 las diplomadas (ahora graduadas) en Enfermería, cuatro más que el año precedente. Las matronas son las mismas, 13 y también se mantiene el resto del personal no sanitario, compuesto por 38 personas.
En el hospital también se ha dado un proceso parecido: hay menos médicos trabajando, pero más enfermeras. Así, la estructura de efectivos apunta a un total de 309 médicos en 2020, de los cuales 10 son temporales. Un año antes había 316 doctores, diez de ellos también temporales. De un año a otro se han perdido siete facultativos.
Enfermeras también hay menos, 20, ya que ha pasado de 499 a 479. Las matronas se mantienen igual, con 15 efectivos y el resto del personal sanitario ha perdido tres, al pasar de 476 a 473.
Comunidad
Los datos son una fotografía fija de los efectivos a fecha 31 de diciembre de cada año, según explica la Consejería de Sanidad. La situación de Zamora no es un caso extraño en el conjunto de la comunidad. Tal y como apunta el propio estudio oficial de la Consejería “el total de personal en Atención Primaria ha disminuido un 3,3% en la comunidad, con un descenso mayor en las áreas de salud de Ávila (-7,6%), Soria (-6,3%) y Segovia (-6,2%). Solamente en el área de Valladolid Este la variación del personal en Atención Primaria ha sido positiva, con un incremento del 0,9%”.
Desagregando por tipo de personal, el número de efectivos sanitarios “ha disminuido en el último año un 4,5% en la comunidad, destacando las áreas de Ávila (-8,4%) y Soria (-8,2%). En ninguna de las áreas de salud la variación ha sido positiva”. Tampoco en la de Zamora.
Por otro lado, “el personal no sanitario ha aumentado en el último año un 1,6%. Por área de salud, destacan los aumentos del 6,3% en Valladolid Este y del 5,4% en Palencia”. Zamora es una de las provincias con mayor porcentaje de personal sanitario sobre el total.
La marcha en defensa de la sanidad, a partir de las 12.00 horas
El Movimiento en Defensa de la Sanidad Pública espera una masiva respuesta popular en la manifestación convocada para el mediodía de hoy, que discurrirá entre la plaza de Viriato y la Delegación Territorial de la Junta. Jerónimo Cantuche, portavoz de los convocantes, señaló que la convocatoria la respaldan la treintena de colectivos que forman parte de la plataforma, además de otras muchas entidades, ayuntamientos y particulares que han manifestado su adhesión a la manifestación.
Además del objetivo genérico de defensa de la sanidad pública y la protesta por las carencias de atención sobre todo en algunas zonas del medio rural, los convocantes han puesto en acento en su parecer contrario a los planes de reestructuración de la Atención Primaria plasmados en un primer borrador de la Consejería de Sanidad.
A juicio de la Plataforma, fijar un mínimo de cinco mil habitantes para mantener una zona básica de salud significa que una docena de las 22 zonas de Zamora tendrá que unificarse con otras o disgregarse. Además al fijar un cupo mínimo de 400 pacientes por médico hay 14 puestos de doctores en el medio rural que peligran, por no llegar a ese número de cartillas.
Sin embargo, los convocantes de la protesta estiman que hay que tener en cuenta otros factores, como la dispersión de los núcleos de población. Tampoco están de acuerdo con poner unos consultorios de atención diaria hasta los que se deberían trasladar los pacientes con un transporte.
