Han sido un total de 851 menores los que han participado en el programa Conciliamos de verano en la provincia de Zamora. Una cifra nada desdeñable, si se tiene en cuenta que el pasado año los participantes fueron 285 niños y niñas. Este aumento en un 66,5% se debe en parte al aumento de los lugares —buena parte de ellos en pueblos de la provincia— donde se ha podido desarrollar esta iniciativa de la Consejería de Familia.

Otro dato que ha aumentado en esta última edición ha sido el número de centros adheridos. En el periodo estival de mayor oferta han desarrollado este programa un total de 117 centros ubicados en 110 localidades, frente a los 53 del año pasado

La titular del área, la zamorana Isabel Blanco, visitó ayer uno de los centros burgaleses donde se ha puesto en marcha este verano, el CEIP La Charca, de Miranda de Ebro y destacó la suma de 10.454 alumnos que este verano se han beneficiado de Conciliamos, al tiempo que recordó que el nuevo Bono Concilia acumula casi 12.000 solicitudes en un mes. Blanco se comprometió a continuar impulsando las políticas de conciliación.

“La protección y el bienestar de las familias constituyen una prioridad para el presidente Mañueco y desde su gobierno ponemos todo nuestro empeño en procurarles un mejor futuro, con más oportunidades”, subrayó la consejera. Como ejemplo, se refirió a las mejoras introducidas en el programa Conciliamos desde el inicio de la legislatura o a la puesta en marcha de una nueva ayuda económica denominada Bono Concilia, dos recursos al servicio de las familias, adaptados a sus nuevas necesidades.

El programa Conciliamos ofrece atención lúdica a niños de entre 3 y 12 años —o hasta 14 se si trata de alumnos con necesidades específicas de apoyo educativo— en periodos vacacionales, como Carnaval, Pascua, verano y Navidad, mientras sus progenitores trabajan. En su desarrollo colaboran las entidades locales, que prestan las instalaciones y se encargan de su mantenimiento.